Miquel Mir durante su intervención de este martes.

El conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miquel Mir, ha destacado en el Parlament que se trabaja ya en el nuevo contrato de vigilancia y asistencia al fondeo. Así, en estos momentos se están analizando las carencias y necesidades en Baleares para definir este nuevo contrato.

El diputado del Grupo Mixto, Antonio J. Sanz, ha preguntado al conseller si el Govern incluirá en los presupuestos de 2022 un incremento del servicio de vigilancia a los fondeos sobre posidonia en el litoral de Formentera.

Sanz ha recordado que de las 56.000 hectáreas de praderas de posidonia, el 25 por ciento está en Formentera. Asimismo, ha explicado que en la Isla este año sólo se ha vigilado un tramo de litoral y toda la parte de Migjorn no ha contado con este servicio, aunque ha sufrido una "agresión más grande" por parte de embarcaciones.

El diputado ha recordado además que el paso de Es Freus posiblemente es el punto "con más presión náutica" de todo el Mediterráneo, por lo que han pedido una modificación del servicio y que alguna barca de vigilancia pueda controlar la zona de Migjorn.

Mir ha recordado que para hablar del tema hay que tener datos que permitan realizar un análisis en perspectiva. "Formentera tiene las mismas barcas que Mallorca", a pesar de la diferencia sustancial de superficie, ha recordado el conseller. También ha explicado que en Formentera la vigilancia comienza 15 días antes que en el resto de las Islas.

"El servicio ha funcionado de una manera notable", ha considerado el conseller, quien ha explicado que este año más de 66.000 embarcaciones han sido controladas y sólo un 1,2 por ciento han tenido que desplazarse.

En 2018 el servicio comprobó 5.142 barcos, obligando a moverse al 9 por ciento. Así, el impacto de los fondeos se ha reducido de manera porcentual 7 puntos en este tiempo, ha afirmado Mir.