Imagen de un chiringuito de playa en Formentera. | Daniel Espinosa

La polémica por el futuro de los chiringuitos de Formentera continúa y el Consell respondió ayer al aluvión de críticas y al malestar generado en la isla por el hecho de que los concesionarios de Formentera se hayan quedado sin posibilidades de volver a gestionarlos después de tantos años. En este sentido, el Consell de Formentera recordó ayer, a través de un comunicado, que el proceso de adjudicación de la licitación para la cesión de la explotación de los servicios de temporada en las playas de Formentera está abierto. Esto significa que el siguiente paso es «requerir a las personas y empresas licitadoras la documentación previa a la adjudicación de la contratación, para así revisar que efectivamente se cumplen todos los requisitos. Después, la propuesta se deberá aprobar por comisión de Gobierno y habrá un proceso de 10 días para presentar alegaciones», expresaron y añadieron que, una vez superados estos plazos, «el Consell de Formentera tendrá 15 días para hacer la adjudicación definitiva». Así, desde la máxima institución insular de la pitiusa sur destacaron que el «procedimiento se está haciendo en todo momento respetando la legalidad y la libre concurrencia».

En cuanto a los nuevos concesionarios, el lote de la playa de Cala Saona ha ido a parar a la empresa Mar y Playa 2 S.L. De los dos lotes de la playa de Es Pujols, uno ha sido adjudicado a apartamentos Castaví S.A. y el otro a Paraíso de los Pinos S.A.

El lote de la playa de Es Copinar ha recalado en la compañía Tafa Marenglen, el de la playa de Migjorn en Far Away La Mola S.L. y el de la playa de Ca Marí en la empresa Ojalá Formentera 3 S.L.

Todavía faltan por adjudicar dos chiringuitos más. Uno de ellos es el conocido bar Pirata de Migjorn y el otro la Franja, en la playa des Arenals, en Migjorn. En ambos casos la gestión recaerá en nuevas empresas, ya que los anteriores concesionarios desistieron presentarse al concurso por «las condiciones draconianas de la licitación».

La polémica saltó la semana pasada tras conocerse que ninguna de las empresas familiares que gestionaban hasta el momento los chiringuitos de playa de Formentera ha logrado volver a ser la adjudicataria de una de estas concesiones de servicios de temporada en las playas de la pitiusa del sur.
La Mesa de Contratación de estas concesiones decidió el jueves pasado, tras valorar los diferentes aspectos que componían cada una de las ofertas, proponer la adjudicación de los distintos lotes que incluían un quiosco de playa a diferentes empresas que, hasta el momento, no habían operado en este sector en la pitiusa del sur.

Tras esta licitación, la gestión familiar que ha caracterizado a los chiringuitos de las playas de Formentera en las últimas décadas pasará a tener un carácter más puramente empresarial. El presidente de la Asociación de Concesionarios de Playa de Formentera, Bartolo Escandell, aseguró a este rotativo que ha sido un «shock» conocer el resultado del concurso. «De los concesionarios viejos, los de toda la vida, no quedamos ninguno», aseguró apesadumbrado, «nos han echado a todos. Vamos todos fuera», se lamentó.

El apunte

Protesta este jueves

El malestar generado en Formentera es tal que se ha convocado una protesta por la «muerte del modelo tradicional» en estas concesiones. La convocatoria es de un minuto de silencio ante la sede del Consell de Formentera, este jueves a las 18.15 horas. Los convocantes explicaron en su llamamiento a la protesta que «el modelo económico tradicional y familiar de la isla está en peligro». Y precisaron que «el último clavo del ataúd ha sido la licitación de los quioscos, donde han primado las ofertas económicas por encima de los proyectos y de la tradicional forma de llevarlos».