Un momento de la concentración celebrada contra el Consell por el concurso de servicios de playa. | Toni Planells

El Consell de Formentera todavía no se ha puesto en contacto con los concesionarios de playas que acababan su concesión para preguntarles si estarían dispuestos a explotarlas un año más.

Así lo aseguró ayer el presidente de la Asociación de Concesionarios de Playas, Bartolo Escandell, que había regentado hasta esta temporada un chiringuito en Cala Saona durante más de cuatro décadas.

Escandell manifestó su deseo de que, a más tardar, la institución se ponga en contacto con los interesados a lo largo de esta semana, ya que en su caso «necesitaríamos entre 15 y 20 días en montar el bar y tenerlo todo preparado para dar servicio». Esto supondría que, si desde el Consell no se empieza a trabajar cuanto antes en esta cuestión, las playas de la isla podrían quedarse sin servicios todo el mes de junio.

En términos similares se manifestaron otros concesionarios, en este caso de hamacas y sombrillas, que aseguró a Periódico de Ibiza y Formentera que «lo tenemos todo preparado para que en cuanto envíen el comunicado, pagar e instalarlo todo», algo que pensaban que sucedería hoy mismo. «Pensábamos que mañana (por hoy) podríamos empezar, pero será pasado (por mañana) con suerte», indicaron, tras haber tratado de contactar ayer con el Consell y resultar imposible por ser festivo en la isla.

Desde el grupo de la oposición su portavoz, Lorenzo Córdoba, se mostró muy sorprendido de que todavía no hubiera puesto en marcha el Consell el tema de las concesiones. «Pensaba que ya estaba todo en marcha», aseguró, y máxime cuando la institución ya lo había anunciado a los medios de comunicación. «Hacen política de titulares, pero en la realidad siempre hay algún problema», insistió.

Córdoba calificó de «absurdo que digan en una comisión de gobierno que ya está todo hecho y que no se haya avisado ni se haya dicho nada a los que tienen que dar el servicio». A este ritmo, denunció que las playas estarán sin el servicio de los quioscos hasta finales de junio o principios de julio.

Alegaciones

Por su parte la presidenta de la institución insular, Ana Juan, aseguró ayer en declaraciones a Radio Ibiza que la licitación de las nuevas concesiones podría alargarse por los contenciosos administrativos interpuestos por dos de las antiguas adjudicatarias y por la gran cantidad de alegaciones que se han presentado, por lo que no se podría determinar cuánto tiempo durará la prestación de servicio de los concesionarios salientes. Lo más probable, indicó, es que funcionen durante toda la temporada, además de confiar en que la situación se desenmarañe para 2023.

Continuó asegurando la presidenta insular que el proceso de licitación no para y que su objetivo es ser lo más escrupulosos posible para dar garantías tanto a los que venían prestando el servicio como a los nuevos concesionarios. Todo ello, subrayó, con el aval de los servicios jurídicos.

Solicitan la nulidad del concurso

Hay que recordar que dos empresas que habían optado a alguna de las concesiones de servicios temporales de las playas de Formentera presentaron el pasado 12 de mayo un recurso contencioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Baleares solicitando la nulidad del concurso. Asimismo, y como medida cautelar hasta que el tribunal dictamine sobre el recurso, reclamaron la paralización del proceso administrativo.

Según argumentaron en los 16 folios de los que consta el recurso, el proceso de adjudicación de los lotes debería ser «nulo» ya que la administración «cambió las reglas del juego» una vez que se había iniciado el proceso y con las ofertas de las empresas aspirantes ya presentadas. Al parecer, según denunciaron, en el pliego de condiciones se valoraban determinados aspectos pero, «al emitir el informe requerido, los servicios técnicos del Consell incurrieron en una patente extralimitación, pues no se limitaron a aplicar los criterios de adjudicación previstos en los pliegos, sino que los interpretaron e introdujeron nuevos criterios de valoración ajenos a los pliegos ampliando sus exigencias».