Imagen de archivo de s'Estany des Peix.

El número dos de la candidatura de Toni Freixas a las pasadas elecciones del Fútbol Club Barcelona, el notario Sergi González, se enfrenta a una pena de cinco años de cárcel y a una multa de 20 meses, a razón de 20 euros diarios, por un presunto delito de estafa relacionada con una operación inmobiliaria en Formentera. Según ha podido saber Periódico de Ibiza y Formentera, dicho juicio podría estar relacionado con la frustrada construcción, en terrenos adyacentes a s’Estany des Peix, de una promoción urbanística consistente en 80 apartamentos junto al lago.

La Fiscalía considera que González se apropió indebidamente de 420.000 euros del ex dueño de Café del Mar de Barcelona. Al parecer, según publica el digital Crónica Global, este proyecto urbanístico en la menor de las Pitiusas se impulsó en el año 2016. González ejercía como representante de esta promoción, aunque había otros participantes y un testaferro. Ese mismo año los promotores convencieron a empresario portugués Joao Cohen, que heredó en 2018 Café del Mar Barcelona, a que invirtiera capital para, posteriormente, recuperar «grandes beneficios» con la venta de pisos que se querían edificar en la zona.

Un proyecto que era prácticamente imposible que se pudiera desarrollar ya que, según la documentación que obra en el juzgado de Instrucción número 10 de Barcelona, ni la administración (el Consell de Formentera) había dado el visto bueno a la operación ni los propietarios querían vender las tierras. En este sentido, Periódico de Ibiza y Formentera ha podido saber que eran numerosos los propietarios de terrenos implicados en la operación y que la mayoría de ellos se había negado a vender sus terrenos junto a s’Estany des Peix.

Fiscalía mantiene que los promotores eran conscientes de la imposibilidad de construir estos pisos y, aun así, buscaron y aceptaron el dinero del empresario portugués para poner en marcha la operación. De hecho, Cohen hizo entrega al notario barcelonés de alrededor de 400.000 euros mediante tres cheques de 85.000 euros cada uno y 150.000 euros en efectivo. Parte de estos fondos, según Sergi González, se destinaría a pagar a los intermediarios, mientras que la acusación mantiene que estos ni siquiera existían.

Cuando el exdueño de Café del Mar se dio cuenta de que no había comisionistas pidió explicaciones al acusado, quien adujo que sufría un «problema informático» que le impedía acceder al Registro de la Propiedad para consultar el estado y las cargas de los terrenos de Formentera, detalla Crónica Global, y de esta forma eludió entregar la información al inversor.