JUDIT CARCASONA El Pla Sectorial de Pedreres ha recibido varias alegaciones desde Eivissa que solicitan al Govern balear que declare inactivas o prohiba reabrir las canteras de Santa Bàrbara, situada en el municipio de Santa Eulària, la de Virginias, en el término de Sant Joan, y la de Espartar, ubicada en Sant Antoni.

El Ayuntamiento de Sant Joan ha presentado dos alegaciones. En la primera manifiesta su temor a que la cantera de Virginias o Can Sopes, que está inactiva desde hace 30 años, pueda volver a funcionar. El Ayuntamiento solicita al Govern que exiga la regeneración de esta cantera, situada a dos kilómetros de Sant Miquel, «porque está en un sitio muy peligroso y los vecinos han estado haciendo fuerza para que no vuelva a ponerse en marcha», explicó el alcalde, Vicent Guasch. En la segunda alegación, Sant Joan intercede ante el Ejecutivo para que no cierre la cantera de Can Carbassó, actualmente en activo, «porque da mucho servicio al municipio», añadió el alcalde.

Hábitat y Basuras y las asociaciones de vecinos de es Portalet de Jesús y de Cas Cómodo también han enviado a la Conselleria de Medi Ambient alegaciones contra la polémica cantera de Santa Bárbara, en Jesús. Los vecinos quieren que «se incluya en el listado de canteras inactivas» a esta pedrera «y que no se confíe a sus propietarios la restauración del paraje destrozado». Entre los motivos destacan que «Readymix Asland ha explotado ilegalmente esta cantera» y que la compañía no ha cumplido un plan de restauración presentado en 1984. Los afectados también acusan a la empresa de «amenazas y coacciones» tanto a las autoridades como a los vecinos.