J. MASCARELL/RUIZ COLLADO Muy negras se pintan las cosas en la negociación del convenio de hostelería de Balears. Sindicatos y empresarios estuvieron ayer reunidos durante más de diez horas y no lograron acercar posturas que hagan albergar esperanzas de una próxima firma del convenio del sector, el más importante en Balears con alrededor de 70.000 trabajadores afectados. En todo caso, la reunión de ayer sirvió para que la convocatoria de una hipotética huelga en el sector tome más cuerpo y podría, incluso, concretarse en las próximas horas.

«Hay un buen nubarrón», así de gráfico se mostraba el secretario general de la Federación de Hostelería de CC OO, Rafael Borrás, sobre la marcha de la reunión en uno de los descansos. En principio, ni sindicatos ni empresarios harán declaraciones oficiales sobre el resultado de esta decisiva y maratoniana reunión que podría continuar hoy.

Ignasi Esteve, portavoz de la patronal, señalaba en un receso que la situación es difícil y que «las posturas se han enconado y no descarto nada. Los sindicatos están muy raros y creo que lo sucedido en el discrecional está influyendo en la negociación».