El desembarco o el fondeo de embarcaciones recreativas cerca de los islotes pone en peligro la reproducción de las gaviotas de pico rojo en las Pitiüses. Actualmente quedan en Eivissa y Formentera unas 800 parejas de estas aves, que estuvieron a punto de extinguirse a finales de los años 70.

Precisamente, en Illes Negres se habían instalado unas 150 parejas de gaviotas de pico rojo y ahora, la mayoría de los nidos se han perdido. El Equip de Natura del GEN está colaborando actualmente con la Guarderia Forestal y con la Reserva Natural de ses Salines en la elaboración de un censo de parejas reproductoras de esta especie, que en Eivissa y Formentera escoge normalmente los islotes de poniente para reproducirse, siempre en colonias más o menos numerosas. «La gente que desembarca en estos islotes no suele ir con mala intención pero, por desconocimiento, puede hacer mucho daño», señala Jaume Estarelles, controlador de ses Salines. «Un sólo desembarco -añade- puede perjudicar a una colonia de 300 parejas».

Por este motivo, la Reserva recomienda que si un barco desembarca en un islote y ve muchas gaviotas, que se vaya a otro, sobre todo durante los meses de mayo y junio, que son los de cría.