Las Pitiüses estrenaron ayer oficialmente un nuevo mapa político municipal, marcado por el cambio en los ayuntamientos de Eivissa y Formentera y por la continuidad del Partido Popular en los restantes. La etapa que se abrió ayer en las islas es novedosa en cuanto a que supone el fin de las mayorías absolutas en los consistorios de Sant Antoni y Sant Joan, donde los populares necesitarán el apoyo de otras formaciones para gobernar.

También por primera vez entran en los ayuntamientos concejales de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). Los regidores de la formación independentista en Eivissa, Sant Josep y Formentera no juraron la Constitución, sino que se comprometieron a cumplirla por «imperativo legal». También el concejal de ENE en Eivissa, Maurici Cuesta, optó por otra fórmula, en la que defendió el derecho de autodeterminación. Joan Buades, de Els Verds, fue otro de los concejales que acató la Carta Magna por imperativo legal.

En Eivissa, el representante del Pacte, Xico Tarrés, inauguró ayer una nueva etapa que pone fin a diez años de gobierno de Enrique Fajarnés. La izquierda recupera el Ayuntamiento que perdió Enrique Mayans por culpa de una moción de censura y se plantea el reto de gobernar en una ciudad donde la diferencia con sus oponentes en las urnas fue de unos escasos 86 votos.

La situación política se presenta especialmente compleja en Sant Antoni, donde finalmente Antoni Marí Tur Botja ha conseguido repetir como alcalde, y en Sant Joan. En Sant Antoni, la incógnita se mantuvo hasta ayer, ya que el Pacte Progressista había estado negociando con Democràcia Pitiusa había estado negociando hasta el último minuto.

En Sant Joan, Antoni Marí Carraca ya había asumido que los independientes, liderados por el ex alcalde del PP, Vicent Guasch, no le darían su apoyo, así que también asumió su cargo de alcalde siendo apoyado sólo por su partido. Santa Eulària sigue siendo el principal feudo del PP. Vicent Guasch entra en su sexto mandato como alcalde con una holgada mayoría que le permitirá gobernar sin problemas cuando ya se han cumplido sus 20 años al frente del Consistorio.

Tampoco lo tendrá difícil la derecha en Sant Josep, ya que aunque perdió tres concejales sigue manteniendo la mayoría absoluta. Pocas sorpresas hubo en el pleno de ayer, a parte de un ambiente cordial que no se respiraba desde hacía tiempo por el Consistorio josepí.