La presidenta del Consell Insular d' Eivissa i Formentera, Pilar Costa, pronunció un discurso de investidura que resaltaba el compromiso del nuevo equipo de gobierno con la ecología y «el sentido común en materia urbanística». Pilar Costa adelantó que sus actuaciones se dirigirán hacia «una ordenación territorial sostenible a la presión que sufre un territorio con unos recursos naturales limitados, como Cala d'Hort y ses Salines». Otros compromisos que Costa definió como propios de su programa político fue la defensa de la lengua catalana.

La nueva presidenta del Consell afirmó que apostará por «un plan estratégico para las Pitiüses del 2000, que convierta a las islas en un punto de referencia para el turismo ecológico y destino de acontecimientos internacionales». En cuanto a la oposición, Costa hizo hincapié en «la función de enriquecimiento de la labor de gobierno que ostenta». Además, anunció a Marí Calbet que apuestan por «un traspaso de competencias generoso desde el Govern balear», en respuesta a la recriminación que le hizo el presidente saliente en su discurso.

Formentera tuvo un gran protagonismo en el primer discurso de Costa como presidenta. «La isla deberá asumir todas las competencias que el Estatut d'Autonomía contempla a través de su ayuntamiento», anunció la presidenta. Sin duda, una de las frases más aplaudidas de las pronunciadas por la miembro del Pacte fue la que remarcaba que «por primera vez en la historia las presidentas de los tres consells insulares son mujeres».