El Grup d'Estudis de sa Naturalesa (GEN) considera que Cala d'Hort tendría que protegerse utilizando dos figuras legales diferentes: la Reserva Natural para el espacio que necesita de una mayor preservación y el Parque Natural para lugares donde es necesaria una actuación «menos restrictiva en la que se mantengan los usos tradicionales». La asociación ecologista ha hecho llegar esta propuesta a la consellera de Medi Ambient del Govern balear, Margalida Rosselló, en un documento en el que también se señalan cuáles son los elementos que justifican esta postura.

Según el GEN, «la designación de un espacio protegido en la zona de poniente tiene que incluir las zonas más valiosas y mejor conservadas y no limitarse a Cala d'Hort». Por ello, esta organización propone que también se tenga en cuenta la zona de Llentrisca, los ocho islotes de Poniente (Vedrà, Vedranell, Galera, Espartar, Frare, ses Bledes, Bosc i Conillera) y una franja litoral. Esta zona señalada por el GEN coincide de forma prácticamente idéntica con la ANEI número seis identificada como Llentrisca-sa Talaia.

Entre los principales valores ecológicos que tiene el lugar, esta asociación destaca las colonias de aves marinas y de halcón marino, así como la vegetación «endémica y litoral». Además, el GEN señala que la inclusión de los islotes en un espacio protegido es fundamental para garantizar «la diversidad y la riqueza biológica de las islas». La agrupación también señala la necesidad de garantizar una correcta combinación «del uso recreativo y la conservación de sus valores», así como de dotar de regulación a un espacio declarado «protegido» desde la aprobación de la Ley de Espacios Naturales.