Margalida Marí, arropada por sus compañeros, anunciando su dimisión. | Marco Torres

La hasta ahora delegada d'Educació en las Pitiüses, Margalida Marí (ExC), anunció ayer su dimisión debido a la imposibilidad de continuar «ostentando la representación en Eivissa y Formentera de una conselleria gestionada íntegramente desde Mallorca y que no siempre tiene la sensibilidad necesaria para entender nuestras particularidades y necesidades», entre otras razones.
Marí, que apareció arropada por sus compañeros de la coalición Esperança Marí, Josep Maria López Garí y Marian Suárez, apuntó las dificultades a la hora de trabajar debido a la falta de presupuestos, así como de capacidad de gestión y decisión para dar respuesta a las necesidades de las Pitiüses. «El hecho de reconocer que hay trabajo hecho y que, en otros ámbitos, sí que se ha dado respuesta a nuestras particularidades no es ahora suficiente para darme las fuerzas necesarias para continuar», indicó la ya ex delegada d'Educació.
La gota que colma el vaso
En su comparecencia, Marí indicó que toda la problemática que envuelve al CP Can Misses ha sido la gota que ha colmado el vaso. «Todos tenemos un límite y el mío ya ha llegado. Creo que las cosas se están haciendo bien desde el pasado lunes», señaló, aunque reconoció una «falta de coincidencia con algunas actuaciones».
Marí asumió que la centralización en materia de educación ha sido uno de los motivos de su decisión. «Si uno se hace responsable de la gestión, uno lo asume como propio y es fácil hacerse responsable, incluso cuando te equivocas; pero cuando la gestión no depende de uno y se tiene que defender la gestión que se decide en otro sitio, se hace más difícil. Creo que la descentralización se debe replantear y afrontar», indicó.
Para la ya ex delegada d'Educació, la situación para poder dar respuesta a las necesidades de las Pitiüses pasa por llevar a cabo una «política de infraestructuras atrevida y unas actuaciones concretas».
Asimismo quiso agradecer el trabajo, tanto de la comunidad educativa, a la que se pone a su disposición «para colaborar en cualquiera acción que favorezca la mejora de la situación de la enseñanza en las Pitiüses»; así como a todos los compañeros de Eivissa pel Canvi por sus «ánimos, ganas y su implicación». Igualmente, pidió disculpas por las veces que no ha sabido estar a la altura «de las necesidades de las Islas».