Foto de archivo de Francesc Fiol. | Jaume Morey

El portavoz del PP en el Parlament, Francesc Fiol, atacó hoy al presidente del Govern, Francesc Antich, por haber practicado un «ejercicio de hipocresía» al haberse presentado como el «adalid de la limpieza y del poner orden» tras haber expulsado a UM de las instituciones por los casos de corrupción que salpican a este partido. Asimismo, le reprochó que durante toda la legislatura contara con el voto del ex parlamentario Bartomeu Vicens pese a estar «imputado, procesado, empapelado y en capilla de ser condenado».

En una pregunta en el pleno del Parlament, Fiol interrogó al jefe del Ejecutivo sobre qué ha cambiado para contar primero con el apoyo de Vicens y hace sólo unas semanas tomar la decisión «inmediata» y que «sorprendió al mundo entero» de remodelar el Govern deshaciéndose de los consellers de UM. Asimismo, el 'popular' criticó que ahora trate de hacer lo que «no fue capaz» de realizar durante dos años y medio de legislatura, en referencia a las medidas anticrisis.

Por su parte, Antich detalló en su intervención que, a consecuencia de que el Govern está en minoría, lo primero que ha hecho es contactar con la oposición -PP y UM- para alcanzar «acuerdos y fórmulas de estabilidad». Y, asimismo, reconoció que «es verdad» que el Ejecutivo balear tiene una «parte de trabajo muy importante» a realizar en el Parlament, pero, según remarcó, también cuenta con el Consell de Govern, que tiene «muchos proyectos e inversiones y una capacidad de actuación increíble y muy buena para los ciudadanos».

Antich destacó que, a pesar de esto, es consciente de que gobierna en minoría y, por tanto, su voluntad es hablar con la oposición para hallar «puntos de acuerdos» ya que «los ciudadanos nos lo agradecerán».

Cuestión de confianza

Fiol se sumó a la petición expresada durante los últimos días por el PP en referencia a la necesidad de que Antich se someta a cuestión de confianza en la Cámara balear, al entender que la actual situación del Govern «invita» a esto y «cuanto antes mejor» ya que, en caso contrario, el Ejecutivo continuará «deteriorándose», y será «manifiestamente incapaz» de sacar adelante propuestas «y si no al tiempo», auguró el 'popular'.

El presidente señaló que será durante su comparecencia parlamentaria del próximo jueves cuando tendrán ocasión de abordar si el Govern está intentando hacer ahora lo que no ha hecho durante lo que lleva de legislatura, según cree el PP, algo que Antich tiene «muchas ganas» de rebatir.

«Vamos a seguir gobernando y escuchar a la oposición porque estamos en minoría», concluyó el jefe del Ejecutivo, quien también manifestó que cuando adoptó la decisión de apartar a los 'uemitas' de la gestión ejecutiva del Govern habló con los tres ex consellers afectados -Miquel Àngel Grimalt, Mateu Cañellas y Miquel Ferrer- «y creo que entendían la situación por la situación límite» a consecuencia de que varios dirigentes de su formación fuesen detenidos en el marco de la Operación Voltor, que investiga el presunto desvío de fondos públicos a través del Instituto de Estrategia Turística (Inestur) en la presente legislatura.

Aroma de vendetta

Fiol también criticó que la Conselleria de Turismo tenga actualmente en Joana Barceló a su cuarta responsable durante el actual Govern y remarcó la «preocupación» que genera este hecho en el sector, puesto que mientras que Miquel Nadal acudió a la Feria de Londres, Miquel Ferrer lo hizo a Fitur y ahora vaya a ser Barceló quien represente a las islas en la ITB de Berlín.

El portavoz parlamentario también señaló que existe un «aroma de 'vendetta' que da miedo y asusta» en cuanto a la destitución del presidente del Institut de Estudis Baleàrics (IEB), Sebastià Serra -nombrado por UM- y la «minimización» de esta entidad.

Cabe recordar que ayer fracasaron las reuniones que Antich mantuvo con PP y UM con la intención de alcanzar un 'Pacto contra la crisis' y dar estabilidad al Ejecutivo autonómico.