Autoritat Portuària de Balears (APB) puso ayer paños fríos a la solicitud de Vila y del Consell para que se defina cuanto antes el Plan Especial del puerto, al asegurar que este documento se podrá elaborar cuando se inicien las obras de remodelación y ampliación previstas en es Botafoc.
Sin embargo, desde Autoritat Portuària destacaron que, si bien es su competencia elaborar este plan, se hará «en coordinación» con el Consell y el Ayuntamiento de Eivissa, y deberá ser aprobado por la administración competente en urbanismo en este caso, que es la máxima institución.
El plan especial es el instrumento urbanístico que deberá definir los usos detallados del puerto, sus parámetros e intensidades, y la posibilidad de construir edificios en el interior de la zona portuaria.
El calendario que maneja APB para su redacción será el de iniciar la elaboración del Plan Especial una vez se inicien las obras y en paralelo a la aprobación del Plan de utilización de los espacios portuarios (plan de usos), que es el que delimita las zonas de servicios del puerto y establece sus usos genéricos como son los comerciales, pesqueros, náutico-deportivos y complementarios.
Esto ocurre porque, según la normativa, para redactar el Plan Especial, el plan de usos debe estar aprobado. En este sentido, desde Autoritat Portuària destacaron que la tramitación de este último se encuentra «en un estado avanzado» ya que ha superado el período de información pública y está pendiente de incorporar las alegaciones aprobadas y la reducción de las plataformas hasta los 63.000 m2, consensuada hace un año por el Consell, Vila, el Govern y Autoritat Portuària.