El edil de Promoción Económica del Ayuntamiento de Eivissa, Vicent Ferrer, y el conseller de Mobilitat i Medi Ambient del Consell Insular d'Eivissa, Albert Prats, presentaron ayer una nueva iniciativa para dar a conocer la importancia de la posidonia. «Es una actividad para poner en valor el patrimonio. Tenemos visitas teatralizadas en Dalt Vila y la necrópolis y hemos dado un paso más para dar a conocer el tercer bien declarado Patrimonio de la Humanidad, que es la posidonia», explicó ayer Ferrer. La actividad, interactiva y gratuita, permitirá que «la gente pueda participar activamente» y consistirá en talleres y juegos cerca del mar para comprobar la función de la posidonia.
También habrá excursiones en piragua con la posibilidad de hacer fotos con una cámara fotográfica submarina que después se colgarán en una página web. La excursión se realizará en las proximidades de s'Illa de ses Rates. En los juegos de playa se realizarán actividades en las que los más pequeños conocerán la función de la posidonia en la playa con un taller donde, mediante una demostración práctica, se comprobará cómo una playa pierde arena si se quitan las barreras de posidonia. Jaume Torres, representante de la empresa Anfibios, hizo ayer una demostración in situ de la función de la posidonia con una maqueta, una de las actividades que está previsto que se hagan en la playa.
Gestión incorrecta
El conseller Albert Prats lamentó que la posidonia no tenga «el reconocimiento que debía de tener; por eso algunos colectivos y turistas lo ven muchas veces como un residuo cuando no es tal».
Prats insistió que no es un desecho y que «se está gestionando incorrectamente en toda la isla», por lo que el Consell pidió «un esfuerzo a los ayuntamientos para que se pongan de acuerdo con una gestión diferente que no consista en que estas hojas, que no son residuos, vayan al vertedero».
El Consell está preparando un estudio para proponer un modelo de gestión de la posidonia y evitar que vaya al vertedero. En su opinión, actividades como la de Vila «ponen de relieve que este es uno de nuestros tesoros, no es una molestia» y recordó que cuando los turistas empezaron a llegar a Eivissa había posidonia. «Ese era el modelo que teníamos, poco a poco hemos ido copiando un modelo del Caribe que no es el que corresponde», apostilló.