El Instituto Balear de Turismo (Ibatur) efectuó presuntamente entre 2005 y 2007, con el PP al frente del Gobierno balear, un continuo fraccionamiento de contratos para poder adjudicarlos de forma directa a unas 70 empresas, entre ellas Barceló Viajes, Trasmediterránea y los grupos de comunicación Clave y Nimbus, evitando de este modo acometer concursos públicos y utilizando de forma fraudulenta los procedimientos de contratación.

Así lo reflejan varios oficios emitidos por la Jefatura Superior de Policía de Balears y que constan en el amplio sumario del caso, compuesto por diez tomos, y cuyo secreto ha sido levantado esta semana tras más de año y medio de pesquisas en torno al supuesto desvío de fondos públicos producido a través del Ibatur durante el pasado mandato.

Las investigaciones revelan que era «práctica habitual» de la empresa pública fraccionar contratos y hacerlo de dos formas diferenciadas, es decir, por un lado una sola mercantil facturaba varios contratos menores por un único evento diversificando los conceptos, mientras que por otro se aprecian supuestos de fraccionamiento de contratos cuyo origen es sustancialmente idéntico.

De este modo, en el mismo día llegaban supuestamente a adjudicarse dos o más contratos menores a 12.000 euros cada uno -cifra máxima a partir de la cual no puede formalizarse un contrato menor y debe convocarse concurso- en los que figuraba el mismo concepto, e incluso se han localizado contratos otorgados a empresas vinculadas a otras de las beneficiadas.