Muchos eran los que ya iban ocupando las mesas, habilitadas para la ocasión, ayer en la plaza del municipio de Jesus para disfrutar del pregón de fiestas, saborear un buen arroz de matanza y una larga noche de fiesta.
Tras la carpa de la plaza se hallaban cocinando los componentes de la comisión de fiestas dos enormes paellas que ya el simple olor alimentaba.
Maribel y José (Seni), dos de los encargados de la preparación de la paella contaron que llevaban todo el día con los preparativos. Amigos y vecinos forman la comisión de fiestas. Para Maribel lo mejor es ver a la gente contenta, «además este año es solidario y junto con el Fons Pitiús de Cooperació ayudamos a los que más lo necesitan pidiendo un euro o la voluntad junto con un panecillo y buñuelos», comentó Maribel.
El encargado del pregón de fiestas, Javier Cuevas, notario de Jesus que con una placa que le habían obsequiado, explicó que «tras un año como primer notario del pueblo es un honor para mí ser el pregonero de este pueblo que me ha recibido y acogido como si se tratara de una gran familia. Mi primera sensación cuando me ofrecieron hacer el pregón fue de sorpresa y casi sentí que no me lo merecía pero no podía dejar pasar la ocasión».
El pregón lleno de agradecimientos y elogios dirigido a los ciudadanos del pueblo y a sus visitantes con el que Javier subrayó que Jesús es un municipio con un gran sentimiento de pueblo unido, a pesar de estar tan cerca de Eivissa, un pueblo que recibe a los vecinos y visitantes con una muestra de hospitalidad. A continuación el grupo de teatro Atar ofreció su particular presentación de las fiestas.
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