Bartomeu Escandell, ayer en la rueda de prensa sobre las Normas Subsidiarias. | Guillermo Romaní

El conseller d'Urbanisme i Ordenació del Territori, Bartomeu Escandell, anunció que el pasado 15 de noviembre entraron plenamente en vigor las Normas Subsidiarias (NNSS) de Formentera que ponen punto y final a algunas moratorias (como la de las Àreas Naturales de Especial Interés o las de los núcleos rurales afectados por BIC) o suspensiones de licencias además de abrir la posibilidad de que el Consell tenga luz verde para el desarrollo de numerosas infraestructuras como la escuela de Sant Ferran.
«Se levantan las suspensiones pendientes, como la del Decreto del Govern respecto a las ANEI, suspendidas hasta que los instrumentos de ordenación territorial de cada isla decidieran qué querían hacer con y en estos espacios protegidos, aspecto en el que Formentera ha sido la primera en dar ese paso, por lo que la suspensión en ANEI se ha levantado y se tramitarán todos los expedientes paralizados», dijo.
En las zonas catalogadas ANEI se mantiene la parcela mínima que es de 100.000m2 pero en cambio se disminuye la volumetría. El máximo de superficie a construir será de 250m2, una disminución respecto a los parámetros hasta ahora existentes que permitían más de 300m2, y al mismo tiempo se elimina la planta piso para evitar impactos paisajísticos, y los anexos, de manera que quedarán en un solo cuerpo.
Existen siete u ocho expedientes en trámite de construcción de viviendas en Xarxa Natura 2000, donde ahora no se puede construir, que serán estudiados de forma especial desde la conselleria de Medi Ambient del Govern ya que su tramitación es anterior a la entrada en vigor de las normativas europeas y por eso podrían darse casos de indefensión de propietarios que compraron terrenos y presentaron proyectos dentro de la regulación.
También en BIC
Se levanta asimismo la suspensión existente en núcleos urbanos afectados por los BIC de los conjuntos históricos, como Sant Francesc, el Pilar de la Mola y Sant Ferran, en donde las NNSS harán de Planes de Especial Protección, dijo Escandell refiriéndose a los instrumentos iniciados por la COP. En este sentido, resaltó que el resto de las moratorias o suspensiones, como las que afectaban a suelo rústico común, ya se habían levantado con la aprobación inicial.
El conseller resaltó que entre las aprobaciones iniciales y definitivas se produjo una situación en la que convivían dos normativas, pero este período transitorio ya se ha acabado «y los proyectos entrados desde el 15 de noviembre se atendrán a la nueva normativa y los presentados anteriormente seguirán los procesos habituales cumpliendo las dos».
Infraestructuras y obras
Por otro lado se podrán comenzar a desarrollar todas las obras, infraestructuras y proyectos que el Consell tenía previstos y estaban pendiente de la aprobación definitiva. «Me refiero a comenzar a firmar convenios de gestión con los propietarios para la cesión de terrenos como el destinado a la futura escuela de Sant Ferran, la vía de circunvalación de es Pujols y la del polideportivo de Sant Francesc, la construcción de las VPO, la Deixalleria y la sede de la Cooperativa Agrícola», explicó.

Antes de enero se presentará el primer proyecto de las VPO
Escandell avanzó que antes de final de año se presentará el anteproyecto de la construcción de VPO en régimen de alquiler en Sant Ferran, ocupando un solar que se compró meses atrás y con la cesión, por parte del Consell, del solar contiguo, donde está el parque infantil Bob Baldón.
Las obras deberían comenzar en marzo o abril, señaló el conseller, que señaló que el sistema de construcción es absolutamente novedoso y que por tanto, en principio la construcción presentaría la ventaja de ser rápida, de no interferir de la manera en la que unas obras de este cariz provocan habitualmente y, muy importante, no afectaría a la remodelación del vial en el que se levantarán las VPO.
Por otro lado, resaltó que los núcleos urbanos se convertirán de forma progresiva en peatonales, se habilitarán aparcamientos, vías de circunvalación para hacer de dichos núcleos zonas más 'humanas' y en suelo rústico se apuesta por limitar el volumen de las viviendas adecuándolas a la realidad e impidiendo su impacto en el paisaje. Asimismo se frenará el consumo desmesurado de un territorio sumamente limitado.

Desarrollar «una verdadera zona industrial»
Ahora se podrá desarrollar la zona industrial de Sant Francesc, dijo Escandell, ya que «tenemos el proyecto de urbanización, el de compensación y estamos en condiciones de desarrollarla y comenzar a otorgar licencias para que se llene de empresas y sea lo que nunca ha sido, una verdadera zona industrial». Se contempla un catálogo de comercios en suelo rústico que prima mantener las actividades pero hay que hacer un plan de gestión, especialmente de los que desarrollan actividades molestas para darles un plazo amplio «ya que mucha gente ha invertido para comprar terrenos y realizar diversas actividades empresariales, pero en el fondo la voluntad es que con el tiempo todas estas actividades se vayan concentrando en la zona industrial».