La Autoridad Portuaria de Balears, APB, explicó ayer a este rotativo que mantiene «una discrepancia con el Consell de Formentera en la forma en la que aplica el cobro del Impuesto de Bienes Inmuebles, IBI, en la zona de servicio del puerto». E
sa diferencia de criterios, que se traduce en valoraciones divergentes de lo que sería el IBI de Carácter Especial, hizo que la primera institución de Formentera, a través de la Agencia Tributaria de las Illes Balears, ATIB, iniciara un proceso de embargo de las cuentas de la APB por un importe de 25.000 euros. «Se trata de un conflicto jurídico en el que la APB ejerce su derecho a defenderse legítimamente, ante lo que considera una liquidación de un impuesto de forma inapropiada, si bien no elude su obligación a cumplir el pago que le corresponde» afirmó un portavoz de la Autoritat Portuària.
Desde la APB se considera que determinadas zonas de servicio del puerto deberían estar exentas del pago del IBI, por lo que considera que el Consell debe proceder a la exención del mismo y se quiere dejar claro que el retraso de la liquidación del IBI «no se trata de un caso de morosidad, sino de una defensa legítima de la administración pública de cumplir fiscalmente con lo que le corresponde».

Mismo conflicto en Maó pero menos dinero
En este sentido el portavoz de la APB señalaba que este conflicto jurídico que mantiene APB con Formentera es similar a los que tiene con el consistorio de Maó (que le ha embargado 445.000euros) y con los ayuntamientos en los que se encuentran los puertos de interés general del Estado en Balears, es decir, además de la Savina en Formentera y Maó en Menorca, es Castell también Menorca, Palma y Alcúdia en Mallorca y el puerto de Vila, aunque en este último no adeuda nada.