La alcaldesa de Vila, Lurdes Costa, y el concejal de Núcleo Histórico, Marc Costa, anunciaron ayer que el Ayuntamiento de Vila ha remitido al Ministerio de Fomento esta misma semana el proyecto ejecutivo de la reforma de sa Peixateria y el Mercat Vell.

Así, manifestaron que las obras podrían empezar en el mes de octubre, ya que ahora debe ser el Ministerio de Fomento quien adjudique el proyecto. El plazo de ejecución de estas obras es de doce meses, según explicó el concejal Marc Costa.

La remodelación de estos dos emplazamientos cuenta con un presupuesto de 2,8 millones de euros y el objetivo es recuperar el estado original de ambos edificios y revitalizar la zona del núcleo histórico: «Tienen que seguir siendo equipamientos de servicios y ofrecerlo a estos barrios. Las personas que viven en esta zona deben tener las necesidades diarias cubiertas», matizó la alcaldesa.

Por ello, en el Mercat Vell se suprimirán las paradas de venta que existen actualmente para sustituirlas por paradas móviles que se instalarán durante el día y serán recogidas por la tarde. De esta manera, la estructura podrá acoger cualquier tipo de actividad cultural, indicó Marc Costa. El concejal explicó que una vez empiecen las obras se intentará hacerlo de forma progresiva con el fin de que de los vendedores no se queden sin lugar de trabajo.

Venta y restauración

En el caso de sa Peixateria, el proyecto incluye la ampliación del edificio con una zona semisoterrada y que se destinará a los servicios de almacenaje y refrigeración. Esta construcción, que también recuperará su fisonomía original de 1875, albergará una veintena de paradas para la venta de pescado y carne. Hasta el cierre de sa Peixateria existían 37 puntos de venta por lo que el objetivo es hacer ahora espacios modulares de diferentes tamaños, según el interés de cada uno de los comerciantes que se instalen.

Asimismo, tres de estas paradas contarán con cocina, lo que facilitará la realización de degustación de productos frescos y la instalación de cafeterías. Estas paradas tendrán acceso a una nueva entrada que se ubicará a pie de muralla donde se recuperará el espacio que actualmente sirve de aparcamiento y se adecuará como plaza. Así, el Ayuntamiento de Vila eliminará una veintena de aparcamientos.

En esta infraestructura se eliminará la bóveda central y se recuperará el hueco inicial que se cubrirá con toldos a fin de protegerlo de la lluvia y del sol. Desde el Consistorio se prevé sacar a concurso todos los puntos de venta de sa Peixateria mientras que en el caso del Mercat Vell se está estudiando la fórmula de gestionarlo, aunque tendrán prioridad aquellos vendedores que han apostado hasta el día de hoy por mantener vivo este lugar.

Vila empezará el lunes la eliminación de los tendidos aéreos

Lurdes Costa y Marc Costa apuntaron que este mismo lunes se iniciará la eliminación de hasta 75 cruces de tendidos eléctricos que se encuentran en las calles de Poble Nou y la calle de la Virgen. A pesar de que, según un estudio municipal, existen 524 cruces de este tipo en los barrios de Dalt Vila, la Marina y sa Penya, éste es el primer proyecto para mejorar la estética del núcleo histórico. Así, el Ayuntamiento de Vila empezará a eliminar los tendidos eléctricos y de telefonía de la calles de la Virgen, Riambau, Bisbe Cardona, Bisbe Torres, Bisbe Azara, sa Creu i Guillem de Montgrí. El coste de esta primera fase de supresión de tendidos es de 336.000 euros.

Nueva imagen para la Plaça d'Espanya, con menos vehículos

El Ayuntamiento de Vila iniciará el próximo lunes las obras de remodelación de la Plaça d'Espanya, ubicada frente al Consistorio antiguo. Las obras, que tienen un coste 312.440 euros y que deberán estar finalizadas antes de Semana Santa, consisten en la sustitución del empedrado y la eliminación de las jardineras. Este último hecho se debe a que éstas transmiten humedad a la estructura, que se traslada a la bóveda de la actual sala de exposiciones. Esta remodelación, que eliminará el aparcamiento a excepción de cinco puestos para casos de emergencia, tiene como fin mejorar la estética general y aprovechar el mirador existente. Asimismo, se prevé eliminar las barreras arquitectónicas del lugar.