Un operario trabaja en la derivación del sistema eléctrico, paso previo a la demolición. | UH

La empresa constructora del nuevo hospital Can Misses ha iniciado los trabajos para la demolición del centro de salud del mismo nombre con el vallado del perímetro de la obra, que incluye también la base del helipuerto. El vallado empezó el lunes y ayer se retiraron los árboles cercanos a la zona de demolición para su posterior trasplante y la derivación de la electricidad, confirmó ayer un portavoz del Àrea de Salud.
En esta primera fase de la demolición se está realizando el desmantelamiento del interior del edificio, con la recogida de los materiales del interior como forja, carpintería, pladur y sistemas eléctricos, y la separación de cada uno para el reciclado.
Está previsto que los trabajos de demolición, desde la señalización de la zona hasta el derrumbe, tengan una duración de 25 días, aunque se cree que se puedan adelantar. El 30 de mayo está previsto el inicio de la demolición de la estructura, con la utilización de una pinza hidraúlica y una retroexcavadora, que se prolongará hasta la retirada de escombros, el 10 de junio.
La constructora, el hospital, el 061, la Dirección Facultativa de Seguridad y Salud y la subcontrata Inaer, que se encarga del transporte árero sanitario, han estado trabajando en establecer un plan de seguridad para que las labores de demolición cuenten con las condiciones de seguridad para el transporte aéreo ya que la base del helipuerto está incluida dentro del perímetro.

Helipuerto
Una vez que se inicie la fase de demolición o cualquier actividad susceptible de generar polvo, el plan de seguridad contempla un riego constante, y no sólo por la seguridad del helicóptero sino también por «cuestiones de bioseguridad, dada la cercanía del hospital», explicó un portavoz del Àrea de Salud. Este plan contempla que las ventanas del hospital estén cerradas y se agilice la retirada de los escombros.
También se ha establecido que, desde el inicio de la demolición hasta la retirada del escombro, se traslade al aeropuerto la base del helipuerto, donde se desplazarán las ambulancias. En los casos excepcionales en los que peligre la salud del paciente se contempla que las máquinas se retiren de la zona para que el helicóptero pueda aterrizar en Can Misses.
Dado el vallado de la zona que ocupa el edificio del centro de salud y del helipuerto se ha trazado una ruta alternativa para los bomberos distinta a la actual para que tengan acceso en caso de necesidad de intervención aunque el vallado permite que las ambulancias del 061 entren a la zona hasta la demolición.

La ubicación definitiva del nuevo centro sanitario será en el hospital actual
El proyecto del complejo hospitalario contempla la desaparición del hasta ahora centro de salud de Can Misses ya que en ese lugar se ubicará las futura central energética que dotará de servicio a todo el complejo. El ambulatorio está previsto que se reubique en el actual hospital donde también se contempla una parte para su uso sociosanitario.
A mediados de enero se trasladó al centro de salud de Vila al personal del de Can Misses para atender las consultas. Su traslado a su sede definitiva en Can Misses será en el tramo final de la obra.
La primera fase de la obra del nuevo complejo contempla la construcción del edificio de consultas externas. La semana pasada empezaron las visitas de los servicios que está previsto su traslado, presumiblemente a lo largo del verano. A final de junio la empresa entregará la obra.