La Mesa Municipal de Turismo del Ayuntamiento de Sant Josep se reunió ayer para realizar el balance de la temporada 2011.
Entre los primeros puntos del orden del día se realizó una valoración de la temporada 2011: «Aunque los datos son positivos, sobre todos los de ocupación y pernoctaciones, el gasto medio de los turistas ha descendido, en relación al pasado año. Sant Josep se consolida como una opción de turismo familiar alemán e italiano, aunque hemos comprobado que los turistas alemanes se han estancado», señaló el primer edil, Josep Marí Ribas Agustinet.
Otro de los temas tratados corresponde a la apuesta que realizará el Consistorio informando a los comerciantes y empresarios los días que los cruceristas visitarán el municipio. «Esta medida puede ayudar a prolongar la temporada, sobre todo, de la oferta complementaria. Necesitamos que nuestros comerciantes se involucren con este tipo de turismo y que demos la sensación de que Sant Josep está abierta fuera de la temporada. Un turista de crucero satisfecho puede ser un visitante en el futuro».
Asimismo, el Ayuntamiento anunció que encargará un estudio para conocer las «especificaciones idóneas para nuestro litoral». «Estamos convencidos que tenemos que proteger las praderas de posidonia, es un bien natural de nuestras costas, pero para ello hay que ser conscientes del número de fondeos que podemos permitir», declaró el primer edil.
El punto más conflictivo de la Mesa de Turismo fue la situación de los proyectos financiado por los créditos FOMIT. Desde el Ayuntamiento apuntaron que los proyectos se encuentran paralizados ante la negativa de la oposición a llevarlos a cabo. «Nosotros creemos en estas obras e infraestructuras. Creemos en la posibilidad de oportunidades que se abre a la zona de Cala de Bou. Una infraestructura cultural y turística, como puede ser es Caló d´es Olí, puede llevar a un desarrollo de la oferta complementaria y hotelera de la zona», declaró Marí Ribas.