El Ayuntamiento de Sant Josep está estudiando el borrador del informe que se tendrá que presentar ante la Agencia Española de Seguridad Aérea (AESA), organismo que debe dar su visto bueno a este estudio para que el Consistorio pueda continuar con la tramitación de sus normas subsidiarias.
Según explicó el concejal de Urbanismo, Javier Marí, el informe está siendo elaborado por una empresa especializada y debe determinar, entre otras cuestiones, «los impedimentos físicos para las operaciones aéreas y las radio frecuencias» en las zonas de servidumbre aeronáuticas, «que afectan a la mitad del municipio», indicó el concejal.
Una vez terminado el informe definitivo, que Marí calcula que podrá llegar en quince días, se podrá conocer al detalle cómo afectará a la normativa urbanística. «Es posible que modifique alguna unidad de actuación y que no permita la edificabilidad que había prevista en alguna zona», explicó Marí.
En concreto, según detalló, el informe puede «afectar a la altura de lo edificios que se habían previsto en las normas», sobre todo, en zonas como Sant Jordi. «Puede ser que limite tanto la altura que no se permita la edificabilidad que había marcada en un principio», detalló el edil.
Este informe era el último trámite que tenía el Consistorio en el camino de la aprobación de su planeamiento, que ha superado ya dos exposiciones públicas y la contestación de hasta 861 alegaciones.
Sin embargo, ahora Sant Josep también tiene que analizar el nuevo decreto urbanístico para conocer el alcance que tendrá sobre el municipio, una tarea que no está resultando nada fácil.
En este sentido, el concejal explicó que los técnicos aún están estudiando el decreto y que las enmiendas se consensuarán entre ayuntamientos y Consell.