La Cofradía del Santo Cristo Yacente volvió a salir ayer por la noche de la Catedral para desfilar por las calles de Dalt Vila de igual manera que lleva haciendo desde que comenzó a hacerlo durante los primeros años de la década de los cuarenta del siglo pasado.
Así, una vez más, la imagen del Cristo, tallada por los escultores Román y Salvador en el año 1944, recorrió con solemnidad algunas de las calles más angostas de la ciudad antigua siempre acompañada de sus fieles y de la música de la Agrupación Musical de la hermandad.