Llevaban gorras y gafas de colores, sudaderas y camisetas con cerezas y marcas deportivas, pantalones cortos y zapatillas y sandalias, pero ayer por la mañana los alumnos de 5º de Primaria de Jesús y de 3º y 4º de Primaria de Santa Eulària se metieron durante una mañana en la piel de los habitantes del Molí de Dalt, en Can Planetes.

Y es que este lugar, cuyos primeros vestigios se remontan al siglo XV, es ahora el Centro de Interpretación del Río y por él pasan regularmente grupos de estudiantes de la Isla para aprender cómo se vivía en él y, entre cosas, ver cómo se molía el trigo para obtener la harina.

Algo que les explicó en primera persona Toni Tur, Sendic, técnico de Cultura del Ayuntamiento de Santa Eulària, deteniéndose, además, en las medidas de capacidad para calibrar el volumen de trigo de las cosechas, como el almud, la barcella, (seis almuds), la mitja cortera (tres barcelles) y la cortera (36 almuds).

Sin embargo, la parte que hizo las delicias de los más pequeños fue el molino de madera de rueda vertical que al salpicar el agua sorprendió a más de uno, que intentaba asomarse para refrescarse ante el intenso calor.
Mientras tanto, los estudiantes de 5º de Primaria del colegio de Jesús, invitados por Aqualia, que ha expuesto en el lugar los trabajos que participaron el año pasado en su Concurso Internacional de Dibujo Infantil, no pararon de tomar notas y apuntes de todo lo que había en los paneles.

Así, algunos como Raúl, Carla, Eric, Ariadna, Marc, Alejandro, Alba, Sara, Iván, Daniel o Sofía salieron entusiasmados del lugar sabiendo mucho más de como trabajaban sus antepasados el trigo «para obtener harina cuando no se podía ir a la tienda a comprar».