Los profesores y alumnos del instituto y del colegio Blanca Dona se unieron en la protesta e hicieron ruido con bombos, cacerolas y silbatos contra los recortes del Govern.

Profesores, alumnos y padres de la enseñanza pública pitiusa se sumaron ayer a la cacerolada convocada por las entidades más representativas de la Comunidad Educativa de Balears, como la Federació Autònoma d’Associacions d’Estudiants (FADAE), las Federaciones de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (COAPA y FAPA Eivissa) y las organizaciones sindicales (STEI-I, CCOO i UGT) en protesta por los recortes en educación.

La concentración más numerosa tuvo lugar a la salida del instituto y el colegio Sa Blanca Dona donde se concentraron unos 200 profesores y alumnos armados con silbatos, bombos y cacerolas, y con banderas reivindicando la educación como «patrimonio de la humanidad» y pidiendo «No més retalls».

En este instituto, un colectivo de profesores «preocupados» que no forman parte de ningún sindicato, según se encargaron de aclarar, denunciaron mediante una nota de prensa que «las intenciones del Govern generarán el caos dentro de las aulas». «De repente pasaremos de tener entre 20 y 25 alumnos dentro de un aula de ESO a tener 35, es claro y evidente que será totalmente ingestionable», destacaron sobre la intención de la Conselleria d’Educació de aumentar las ratios en las aulas, lo que provocará, «que cada profesor tendrá unos 150-180 alumnos» una situación con la que es «imposible evaluar y educar», denuncian.

Otro centro que también se sumó a la cacerolada fue el IES Sant Agustí, en el que participaron representantes la FAPA de Eivissa, como es el caso de su presidenta, Conchi Romero.

La FAPA emitió un manifiesto en el que critica que los recortes anunciados en el Plan de Equilibrio Económico «conducirán al más grande desequilibrio económico y social de la historia reciente de nuestras Islas» «Queda muy lejos el objetivo de reducir las tasas de abandono y fracaso escolar, y de las autopistas de la educación prometidas por José Ramón Bauzá», critican.

Por su parte, el portavoz del sindicato de la ensañanza, STE-I, Pere Lomas, criticó ayer las palabras del conseller d’Educació, Rafael Bosch, que hizo hincapié en que ha mantenido las retribuciones económicas a los docentes. «Vende la moto de que no han tocado retribuciones porque no ha afectado a todos, solo a algunos, pero sabemos que será el siguiente paso y de forma masiva», señaló.

Otros centros como el colegio Balansat, el L’Urgell y el instituto Xarc se sumaron a la protesta así como también, en menor medida, sa Graduada.