Bernabé Linero junto al telescopio del observatorio de Cala D’Hort. g Foto: M.G.

La Agrupación Astronómica de Eivissa sigue dando pasos para acercar lo más posible la astronomía a todas las personas que residen en la Isla. A sus constantes descubrimientos de nuevos objetos que pueblan el universo se une ahora la jornada astronómica para todos los públicos que organiza el sábado a las 21,00 horas en la pista deportiva de Sant Mateu. Bernabé Linero es el secretario de la agrupación.

—¿En qué consiste la cita del sábado?
—En una jornada destinada a la población escolar y a todos aquellos que se quieran iniciar en este mundo. En ella contaremos con cinco telescopios para que, entre otras cosas, se puedan ver la Luna, Saturno y si hay suerte alguna nebulosa y algún cúmulo globular.

—¿Qué tiene la astronomía que engancha a tanta gente?
—(Risas) Pues que realmente es algo mágico. Te hace ganar en humildad porque te das cuenta de lo pequeña que es la tierra en comparación con un universo gigantesco. Además, ver la luna cómo si estuvieras a pocos kilómetros es algo que enamora a cualquiera.

—Y más en un lugar como Eivissa, que es ideal...
—Sí, la verdad es que en este sentido vivir en esta Isla es un lujo en comparación con otros lugares costeros de la Península que tienen un alto grado de contaminación lumínica.

—¿Por eso ustedes logran tantos descubrimientos?
—(Risas) Bueno, principalmente es porque disponemos de un astrógrafo o telescopio robotizado con el que se puede operar vía remota y que está pensado para poder observar zonas muy extensas de objetos de fuera de nuestra galaxia.

—¿Tan potente es el telescopio?
—Sí, es una maravilla. Hace un año que disponemos de él y en los últimos nueve meses hemos descubierto 16 nuevos asteroides que han sido catalogados por el Minor Planet Center, una institución creada por la NASA para registrar planetas enanos, asteroides, cometas u objetos transnetunianos, que son todos aquellos objetos del Sistema Solar cuya órbita se ubica parcial o totalmente más allá de la del planeta Neptuno.

—Entonces estarán muy contentos, ¿no?
—Por supuesto, pero podríamos haber encontrado más si no hubiera sido porque la mitad de las noches no han sido útiles debido a los niveles de humedad, nubosidad o intensidad del viento.

—Pero eso no les impidió poder fotografiar el año pasado la Nebulosa Iris...
—Sí. Ese ha sido uno de nuestros mayores logros. Conseguimos captar con nuestra cámara astronómica una bella y poco usual nebulosa de reflexión, con un diámetro aproximado de 6 años luz, situada en la constelación de Cefeo, a unos 1.300 años luz de distancia de la Tierra. Por eso, y aunque nos llevó más de dos meses de trabajo conseguirlo, ahora queremos apostar por los trabajos de astrofotografías de objetos de otras galaxias.

—Y todo con apenas 18 miembros y sin apenas ayudas de las administraciones...
—(Risas) Sí, realmente sólo somos 18 las personas que aportamos económicamente a la Agrupación Astronómica de Eivissa, aunque también es cierto que siempre estamos recibiendo visitas de todo tipo de personas que acuden con sus telescopios para disfrutar con la astronomía. Y es que con un aparato de calidad media en una noche clara se pueden llegar a observar 400 o 500 objetos muy diversos. Por eso yo siempre digo que todo aquel que nunca ha probado la astronomía se ha perdido una parte del enorme Universo del que formamos parte.