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En la Conselleria de Medi Ambient están convencidos de que el anclaje sobre posidonia por parte de embarcaciones pequeñas no tiene afecciones «significativas» sobre la especie. El Consell d’Eivissa anunció hace unos días que pedirá al Govern que estudie mejor los efectos que puede tener el fondeo de barcos de menos de 12 metros sobre posidonia, una medida que prevé el decreto para proteger la posidonia.

Sin embargo, la directora general de Medi Natural, Neus Lliteras, aseguró que no ha recibido esta petición del Consell, pero garantizó que el medio «puede soportar» este tipo de ancorajes. «La masificación no es por un período muy prolongado, además de que la gente siempre prefiere fondear sobre arena», indicó Lliteras, que recordó que los yates de más de 12 metros tendrán que hacerlo siempre sobre fondo arenoso y que este decreto no se refiere a las zonas protegidas como LIC.

No para calas concretas

«Nosotros no regulamos problemas puntuales, sino cuestiones generales. Sí que es verdad que puede haber un momento en el que en un punto pueda haber una afección y se pueda plantear un sistema de fondeos alternativo que no sea en posidonia, pero ahora mismo no estamos en este punto, ahora se ha hecho una regulación general y no para una cala en concreto», indicó Lliteras, que recordó que este decreto salió a información pública, con lo que ecologistas, organismos científicos como el Imedea o clubes de submarinismo pudieron hacer sus aportaciones. «Se ha consultado con todo el mundo. Quizás una embarcación de menos de 12 metros anclada en posidonia hace más daño cuando hay temporal que una de 15 cuando el mar está en calma, pero no queda más remedio que buscar un límite», añadió la directora, que cree que «no tiene sentido» prohibir el fondeo sobre toda la posidonia. «La posidonia de Balears es el 70% de la que hay en todo el Estado y la mitad de este 70% está protegido como LIC. Nos guste más o menos, es abundante. La tenemos que conservar no solo como ecosistema, sino porque da calidad a las aguas, pero hay que proteger con sentido común, con sensatez y el sistema tiene cierta capacidad de carga que permite que se aguante este tipo de fondeo», añadió Lliteras, que tampoco entiende las críticas de ilegalidad de los ecologistas porque asegura que el texto ha sido revisado por el Ministerio de Medio Ambiente. La mayoría de sanciones por anclar sobre esta especie son leves (entre 500 y 2.000 euros).