Los promotores del campo de golf de Benimussa continúan adelante con sus intenciones de construir esta infraestructura pese a los cambios que se harán en la ley turística. Carlos Grecht, el portavoz de los inversores, explicó que tenían miedo de que la empresa de Holanda que les respalda (cuyo nombre aún no se ha dado a conocer) se echara para atrás después de que el Consell d’Eivissa introdujera una enmienda a la nueva ley turística mediante la cual se establece que los hoteles que se construyan junto a campos de golf serán de 200 plazas y no de 450 como en el resto de Balears.

Sin embargo, Grecht ha estado reunido esta semana con los inversores en Holanda y le han dicho que seguirán apoyando el proyecto. «Representa la mitad de inversión, pero lo han aceptado igual; sigue todo adelante pese a que el negocio será un 50% menos», explicó este portavoz, que indicó que ahora el próximo paso es presentar ante el Ayuntamiento de Sant Antoni, el Consell y el Govern una memoria virtual de lo que quieren hacer, es decir, una recreación animada que mostrará cómo será el campo de golf, cuántos lagos tendrá, etc.

Aceptación institucional

«Lo que queremos es que el Ayuntamiento, el Consell y el Govern acepten el proyecto y luego a partir de ahí comenzará la segunda fase, que será comprar las fincas», explicó Grecht, que recordó que los propietarios están dispuestos a vender, pero primero tienen que saber si las instituciones lo ven con buenos ojos.

El portavoz destacó que lo que ellos promueven es un ‘biogolf’, por lo que las administraciones también tendrán que exigirles determinadas cuestiones en materia ambiental.

Grecht no quiso adelantar cuál es la empresa de Holanda que les respalda y aseguró que no lo harán público hasta que no se compren las fincas. «Si no hay nada concreto ellos no quieren decir nada», indicó. Este campo de golf abarcará entre 600.000 y 900.000 metros cuadrados, tendrá 18 hoyos y un hotel de cinco estrellas que deberá ser de 200 plazas y no de 450 como pretendían. La infraestructura estará a 300 metros de la depuradora de Sant Antoni y se abastecerá de su agua.

Pese a que los progresistas evitaron en su día que se pudieran hacer hoteles junto a este tipo de infraestructuras, el PP ha vuelto a recuperar esta posibilidad, aunque en Eivissa se ha restringido a 200 plazas.