Los últimos datos de la Federación Empresarial Hotelera de Eivissa y Formentera (Fehif) demuestran que la ocupación hotelera en la primera quincena de junio en Formentera ha sido por primera vez en ocho años más baja que en Eivissa. En este sentido, Formentera alcanzó el 67,94% en los primeros 15 días de este mes frente al 73,37% de ocupación de Eivissa lo que supone una caída del 17,8% respecto a 2011 cuando Formentera alcanzó el 82,6%.

«La verdad es que es real, lo palpamos y vivimos cada día. Estos dos últimos veranos nos sorprendió la afluencia turística que hubo en junio, luego en la primera quincena de julio se suavizaba y más tarde iba subiendo hasta la primera quincena de septiembre», destacó Juan Costa Cardona, presidente de la Petita i Mitjana Empresa de Formentera (Pime Formentera). En este sentido, Costa Cardona apuntó que el arranque de la temporada turística «empezó el 20 de este mes. Hasta la semana pasada no hemos podido decir ‘parece verano’». Por tanto, el comienzo de la temporada en Formentera se ha caracterizado este año por ser «lento, muy lento», precisó el gerente de Pime Formentera.

El presidente de la Fehif, Juanjo Riera, afirmó ayer que el promedio de ocupación «normal» para Eivissa está entre el 70 y el 72%, mientras que el porcentaje para Formentera estaría entre el 69 y el 71% de ocupación.

«El año pasado teníamos una serie de factores a nuestro favor, como las revueltas en el mundo árabe, las huelgas y problemas en Grecia y no había Eurocopa ni Juegos Olímpicos», expresó el presidente de los hoteleros, que recordó que la temporada pasada fue «excepcional» para las Pitiüses con un promedio de ocupación hotelera (del 1 de mayo al 31 de octubre) para Eivissa del 78% y del 74,75% para Formentera. En este sentido, una temporada «buena» sería como la del 2010 con una ocupación del 70,62% para Eivissa y del 69,9% para Formentera.

Pese al arranque de temporada que ha registrado, Riera recalcó que Formentera tendrá en los meses de julio, agosto y septiembre una «buena ocupación». Y precisó que en la Isla sigue habiendo «disponibilidad para incentivar la llegada de turistas para que conozcan el auténtico paraíso del Mediterráneo».

El presidente de los hoteleros tiene claro que Eivissa y Formentera son «destinos excepcionales y complementarios». A ello hay que sumar la fama «mundial» de las Pitiüses. «Además suelen soportar mejor las crisis económicas que otros destinos españoles», puntualizó el presidente de la Fehif.