Los ayuntamientos de las Islas perderán competencias y concejales esta misma legislatura, según anunció ayer el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro. El Gobierno prepara la ley de racionalización y sostenibilidad de la Administración, que suprime además las mancomunidades al considerarlas ineficaces. En su lugar, cobran peso los consells, que deberán asumir aquellas competencias obligatorias que no puedan ejercer los municipios de menos de 20.000 habitantes, en el caso de Eivissa solo afectará a Sant Joan.

El Gobierno hará una reestructuración profunda de competencias para que los municipios no ejerzan las que se conocen como «impropias» que son aquellas que realizan los ayuntamientos sin que les corresponda.

Escoletas

Un ejemplo claro son las competencias en sanidad y educación, que serán ejercidas por las comunidades autónomas, lo que en principio implicará que los ayuntamientos no podrán prestar, por ejemplo, el servicio de ‘escoletas’ si no acreditan que tienen los recursos suficientes para ello.

En la nueva ley que prepara el Gobierno central se refuerza el papel de los consells insulars. Se convertirán en ‘supra’ ayuntamientos y deberán prestar aquellos servicios que no puedan gestionar eficazmente los municipios de menos de 20.000 habitantes.

Entre estas competencias se encuentra, por ejemplo, la recogida de basuras, la limpieza viaria o la domiciliación del agua potable o el acceso a los núcleos de población, según figura en la Ley de Bases de Régimen Local que se modificará con este nuevo texto legal.

Menos concejales

El ministro de Administración públicas confirmó que la ley también prevé la reducción de un 30 por ciento en el número de concejales que forman parte de las corporaciones. En cualquier caso, la modificación de la composición de los ayuntamientos no se hará efectiva hasta las elecciones del año 2015 ya que la ley establece que los actuales concejales tienen un mandato de cuatro años. El sueldo de los alcaldes también será homologado por ley al del resto de las Administraciones con el objetivo de que ninguno de ellos «cobre más que un ministro», según explicó la vicepresidenta Soraya Sáez de Santamaría en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.