«No creo en las cuotas ni de mujeres ni ibicencos; yo estoy aquí para trabajar»

—¿Cómo se produjo el fichaje?
—El presidente del Govern se puso en contacto conmigo para ofrecerme el puesto y yo lo acepté porque me hace mucha ilusión y es una oportunidad muy buena profesionalmente para mi.

—Se ha convertido en la máxima representante de Eivissa en el Govern balear. ¿Le asusta esta responsabilidad teniendo en cuenta su inexperiencia en política ya que nunca ha ostentado un cargo público?
—No, no me da miedo, me da mucho respeto por la responsabilidad que supone y porque es un cambio muy grande en mi vida. Tengo muchas ganas de trabajar aquí y estoy muy ilusionada en hacer un buen trabajo. Además, no soy la única ibicenca, aquí hay dos ibicencos que están haciendo un buen trabajo. El hecho de no haber sido cargo público antes no me asusta, este trabajo me lo tomo como gran responsabilidad.

—¿Cree que la han elegido por ser mujer e ibicenca? Lo digo por la situación que se ha creado en el Govern tras la dimisión de Castro...
—No creo que me hayan elegido por ser mujer o ibicenca. No creo en las cuotas ni de hombres ni de mujeres. Y si es por el hecho de ser ibicenca, yo vengo a trabajar por Balears y lógicamente también por Eivissa.

—¿Será la voz de Eivissa en el Govern?
—Seré la voz de Balears, pero por supuesto que siendo de Eivissa tendré más contacto con los problemas de la isla y sus reclamaciones.

—¿Ya le han puesto muchos deberes desde Eivissa?
—No, de momento me están dejando tranquila, pero solo llevo un día, eh (se ríe).

—Bajo su supervisión hay cuatro direcciones generales (Comercio y Empresa, Industria y Energía, Innovación y Desarrollo Tecnológico, y Trabajo y Salud Laboral) algunas de ellas muy importantes.
—Estoy aterrizando y todavía no me ha dado tiempo a contactar con todo el mundo, pero el conseller Aguiló me ha acogido con los brazos abiertos y creo que aquí se puede desarrollar un trabajo muy interesante y aportar muchas cosas.

—Carmen Castro fue muy criticada en círculos mallorquines por no residir allí y porque iba y venía todos los días a Eivissa. ¿Usted que hará?
—No conocía estas críticas a Castro, pero yo viviré en Mallorca entre semana. No porque nadie me lo haya pedido, sino porque lo prefiero así; estudié en Palma, conozco la ciudad y residiré aquí, pero los fines de semana que pueda iré a Eivissa, por supuesto.