Un grupo de turistsa por las céntricas calles de Eivissa, en una imagen de archivo. | Irene G.Ruiz

En una encuesta realizada por la Fundación Gadeso sobre la visión que tienen los turistas sobre Balears, Eivissa obtiene un suspenso con un 4,9 sobre diez, mientras que a Formentera la califican con un 5,7. Ambos resultados suponen el descenso de una décima en comparación con las valoraciones del ejercicio anterior.
Si se entra en detalles hay que apuntar que, según Gadeso, «entre las motivaciones de los turistas para visitar la isla se encuentran los precios (55,3%), el sol y playa (54,2%), la diversión (48,6), el conocimiento anterior (31%) o las recomendaciones de amigos (24,9%), entre otras.
En cuanto a los diferentes puntos que se han analizado hay que destacar que mientas se considera satisfactoria la oferta lúdica actual hay quejas sobre determinados comportamientos que se dan alrededor de esta oferta lúdica. Así, en el apartado de oferta complementaria se establece que tanto el servicio de playa, la oferta gastronómica o los espacios deportivos son puntos que deberían ser «mejorables». La oferta comercial y el precio-calidad son calificados como aspectos «muy mejorables».
En el caso de los alojamientos, nuestros visitantes opinan que el personal, la restauración, la comodidad o la limpieza pueden ser mejorables; las instalaciones muy mejorables y el precio-calidad «adecuado». En los servicios públicos, hay que destacar que los espacios culturales son puntuados con un 3,9 («deficiente») mientras que la asistencia sanitaria y la información pueden ser memorables y la seguridad ciudadana y el transporte, muy mejorables.

El medio ambiente

En el último apartado, el del entorno el medio ambiente tanto la contaminación acústica como la limpieza de calles son puntadas con un 3,8 y un 3,6, respectivamente. La contaminación atmosférica y los espacios urbanos y paisajísticos son calificados por los turistas como aspectos muy mejorables. En este apartado, lo único que recibe un aprobado son las aguas marinas, según la encuesta de Gadeso.
En el caso de Formentera, por su parte, Gadeso advierte de que corre el riesgo «de una excesiva masificación, que en ciertos momentos se convierte en saturación». En este sentido, los turistas visitan la isla motivados por el sol y la playa (57,4%), el precio (55,7%), el precio (55,7%) o el conocimiento anterior (30,9%). En relación a los alojamientos, los visitantes consideran adecuado tanto el personal como el precio-calidad mientras que califican de mejorable la restauración, la comodidad, la limpieza o las instalaciones. En relación al a oferta complementaria apuntar que se considera muy mejorable tanto el precio calidad como la oferta comercial y mejorable la oferta lúdica y los espacios deportivos. Los servicios de playas y la oferta gastronómica, por su parte, están considerados como adecuados. Tanto la asistencia sanitaria como la seguridad ciudadana son mejorables mientras que el transporte y la información son tildadas de muy mejorables.
Por último, en el apartado de medio ambiente hay que apuntar que todos los puntos obtienen la calificación de correcta (aguas marinas, contaminación atmosférica y espacios urbanos y paisajísticos) mientras que la limpieza de calles y la contaminación acústica son tildados de mejorables.

Cansacio del producto turístico, que está obsoleto

Desde Gadeso alertan de que la tendencia a la baja «observada en las valoraciones de los turistas pone de manifiesto un cierto cansancio respecto al producto turístico, provocado por la obsolencia y la degradación de determinados sectores». Por ello, instan a adoptar «medidas de mejora del producto turístico que deben ser conjuntas ente el sector público y el sector privado y, a pesar de que las actuaciones pueden ser localizadas, la visión debe ser integral». Como puntos débiles de Eivissa, Gadeso resalta la necesidad de reconversión integral de algunas zonas, modernizar los alojamientos obsoletos o mejorar el medio ambiente. En Formentera, por su parte, destacan la saturación de excursiones desde Eivissa o la saturación de los servicios públicos en temporada alta.