Los representantes de las asociaciones de comerciantes mostraron el manifiesto que firmaron ayer. | UH

Las asociaciones de comerciantes del eixample Vara de Rey, Eivissa Centre, Sant Antoni, panaderos y pasteleros de Eivissa y Formentera, del barrio de La Marina, Santa Eulària Centre, el gremio de floristerías y viveros de las Pitiüses y Pimeef firmaron ayer un manifiesto para reclamar una defensa por parte de las administraciones locales y autonómica del pequeño y mediano comercio de las Pitiüses. Con este escrito de nueve puntos, los comerciantes explicaron ayer que el principal objetivo es mostrar la «disconformidad» e «indignación» con las nuevas medidas propuestas por el Gobierno central y el Ejecutivo autonómico, como la liberalización de horarios o la posibilidad de poner rebajas durante todo el año.

Motivo

«El principal motivo de este manifiesto es la liberalización total que se quiere dar a a todas las políticas de comercio en general y estamos convencidos, además, que no resolverá la crisis económica. No activará el comercio y provocará que muchos establecimientos cierren de manera más acelerada», explicó José Javier Marí Noguera, presidente de la asociación de comerciantes de Pimeef. En este sentido explicó que los pequeños y medianos comerciantes están «al límite» y calcula que en dos años el comercio local se verá afectado «al cien por cien».

Una de sus principales reivindicaciones pasa por pedir a los políticos locales que «defiendan» al comercio de las Pitiüses. «Porque las palabras ‘pimes’ y ‘emprendedores’ parece que sólo son usadas en épocas de elecciones», precisó Marí Noguera. En esta misma línea, los comerciantes aseguran que la situación de «libertad total» se tiene que intentar regular. «Las administraciones tienen que cambiar la mentalidad porque llegan los grandes formatos y les facilitan el poder instalarse», precisó el presidente de los comerciantes en Pimeef. En este sentido explicó que muchos de los comercios que están abiertos hacen «malabares» para no cerrar. Recordaron, además, el factor social del pequeño y mediano comercio: «El pequeño y mediano comerciante ha ayudado siempre a que la población siga adelante». En este sentido explicaron que la implantación de establecimientos de grandes cadenas «van dejando rastros de comercios cerrados y despoblación en los núcleos urbanos».

En el manifiesto recuerdan, además, que la liberalización del sector dejará «vacía» la Ley de Comercio de Balears, que se aprobó «de manera consensuada» hace dos años. Instan también a que se delimite legalmente y «cuanto antes» las zonas de gran afluencia turística para así poder establecer las reglas en cuanto a domingos y días festivos autorizados para la apertura comercial. Además aseguran que «no entienden» que se considere una zona de gran afluencia turística a un polígono industrial. Los comerciantes explicaron ayer que la liberalización de horarios beneficiará «únicamente» a las grandes cadenas. «La libertad de horarios no es para el pequeño comercio porque ya pueden abrir todos los días. Hoy en día si se quita esta limitación horaria se dará pie a que los cuatro grandes abran los domingos y esto no generará que la gente compre todos los días sino que compren siempre a los mismos», explicó Encarna Planells, presidenta de los comerciantes de Eivissa Centre quien recordó que en ciudades como Barcelona «se está volviendo» al pequeño y mediano comercio.