La temporada turística para los puertos deportivos no arrancó como se esperaba, pues se retrasó alrededor de 15 días. En la actualidad, estas instalaciones viven su «pleno apogeo» y alcanzan el cien por cien de ocupación en los amarres, pero hay una fecha clave en la que todos los puertos deportivos coinciden: 24 de agosto, día de Sant Bartomeu, a partir del cual se espera que la ocupación disminuya.
¿Qué pasará?
A estas características hay que sumar la «incógnita» de septiembre, un mes que funciona más, en algunos casos, con la «improvisación» de los clientes que con las reservas, al que hay que sumar las condiciones climatológicas y, este año, el incremento de tres puntos en el IVA del tipo general (pasa del 18% al 21%).
«El año pasado por estas fechas estábamos igual de ocupación, llenos, y aguantamos así hasta final de mes. Yo no quiero ser agorero, pero creo que tendremos una semanita más fuerte y la cosa empezará a bajar bastante», explicó Daniel Marí, gerente de Marina Ibiza (alrededor de 400 amarres). Según Marí, «incluso» en septiembre del año pasado tuvieron una buena ocupación: «Esperamos alcanzar el 75% de ocupación de septiembre del año pasado», precisó Marí.
En Marina Botafoch, los 428 amarres están «completos», pero esperan que a partir de la semana que viene la ocupación disminuya. «La temporada empezó como 15 días más tarde de lo habitual; arrancamos alrededor del 23 de junio y la temporada alta en sí está siendo de entre 30 y 35 días», explicó Cristina Marí, directora de Marina Botafoch. En cuanto a septiembre, Marí afirmó que es un mes en el que funcionan más con la «improvisación». «La gente sabe que no hay tanto problema para encontrar amarre. Para nosotros suele ser un mes relativamente bueno, pero claro este año tenemos la subida de tres puntos en el IVA», explicó la directora de Marina Botafoch, que precisó: «La diferencia en euros no es tanta, pero psicológicamente sí que es mucho».
En el puerto deportivo de Sant Antoni (579 amarres) «de momento» agosto va bien después de un mes de julio «peor de lo que esperábamos», explicó Emma Costa, directora comercial del Club Náutico de Sant Antoni. Costa augura que el mes que viene «habrá un descenso en las estancias» por la subida del IVA y la dependencia del tiempo, aunque precisó: «Es un mes en el que nunca sabemos qué es lo que va a pasar».
En Ibiza Magna (90 amarres) tienen «lista de espera» de alrededor de 15 embarcaciones diarias. «Ahora mismo estamos llenos y en julio nos ha ido bien. Siempre se espera que a partir del 24 afloje un poco la ocupación, pero las previsiones es que sigamos todo el mes completos», expresó Andrea Arabí, encargada de Ibiza Magna. El incremento del IVA «seguro que nos afectará», pero, según explicó Arabí, cuentan desde mayo con buena parte de las reservas hechas para septiembre. «El mes de septiembre lo tenemos facturado prácticamente desde mayo», precisó.
1 comentario
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La afectación de la ocupación por la subida del IVA es un argumento peregrino. Con independencia de que el precio oficial del amarre con el que piden en temporada alta no tiene nada que ver, el 3% de 200 € son 6€. Una cajetilla de tabaco Marlboro vale 4,50 € . ¿Alguien puede creer que por el precio de una cajetilla de tabaco alguien renunciará a navegar en vacaciones? Exceptuando al remozado Ibiza Nueva, los demás puertos han quedado tercermundistas en instalaciones. El conformismo atávico de la isla y la estacionalidad son la causa de los lamentos de nuestra Ibiza plañidera.