La presidenta de Deforsam, María Furnier, en una imagen de archivo en la sede del Consell d’Eivissa. | Marco Torres

La asociación Defensores de Eivissa y Formentera de la Salud Mental (Deforsam) solicita ayuda «urgente» a las administraciones públicas para tratar y «buscar soluciones» para un ex usuario de 36 años con varias patologías mentales y que actualmente vive en la calle. «Se pone agresivo cuando le falta el dinero. Se ha peleado varias veces y le han pegado, ha ingresado muchas veces y ha pasado por Cáritas en otras tantas ocasiones. Pedimos ayuda para evitar que haga daño a alguien», expresó María Furnier, presidenta de esta asociación. Tal y como resalta la presidenta de esta entidad sin ánimo de lucro «hay que recordar que se trata de un enfermo mental con diversas patologías y que, por ello, necesita ayuda».

El último ingreso de esta persona tuvo lugar hace cuatro días en la unidad breve de Psiquiatría del hospital Can Misses, según confirmaron desde Deforsam. Ayer le dieron el alta y ahora su madre no sabe qué hacer. «Este chico vivía en casa de su madre hasta que ella le tuvo que echar porque se pone muy agresivo cuando no tiene dinero y cuando le pide a su madre y no se lo da; juega a las máquinas y bebe. La señora está agotada porque es una situación que está viviendo desde hace muchos años; no pensaba que esta vez le fueran a dar el alta tan pronto. Cuando le falta dinero pide por la calle y si hace falta vende la medicación», explica Furnier, quien asegura que tienen que ser las administraciones «y los profesionales de la psiquitaría» quienes tienen que «obligar» a esta persona a que ingrese en algún centro especializado.

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