El edificio Es Pla de Vila, construido dentro del proyecto Eivissa Centre para realojar a los habitantes de Santa Margarita.

La auditoría externa realizada por Arnaudit S.L.P. por encargo del Ayuntamiento de Eivissa revela numerosas actuaciones «no muy ortodoxas» por parte de la empresa pública municipal Imvisa y la mixta Itusa que perjudicaron a las arcas públicas en beneficio de la empresa Bruesa en el proyecto de remodelación de la ciudad Eivissa Centre.

En concreto, la auditoría de la empresa mixta Itusa, que comenzó su andadura con un 51% de capital público y un 49% de capital privado (Bruesa), dice que el solar que aportó Vila debería haber sido valorado en 4,4 millones (porque se le iba a aumentar la edificabilidad), en lugar de por 2,4, por lo que la empresa pública Imvisa salió perdiendo claramente frente a Bruesa.

La auditoría también muestra sus recelos por la forma en la que se adjudicó el concurso público a Bruesa. «A pesar de que se cumplieron las obligaciones mínimas, ni la publicidad ni el tiempo para la presentación al concurso estuvieron a la altura de su importancia», dicen los documentos, que aseguran también que se adjudicó a una empresa la ejecución de obras futuras sin concretar su precio y condiciones. Hay otras irregularidades, como la falta de constancia documental de que Bruesa constituyera las garantías provisional y definitiva previstas en el concurso.

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