La Organización Profesional de Inspectores de Hacienda (IHE) considera que, dadas las informaciones publicadas sobre las supuestas operaciones de venta atribuidas a la infanta Cristina y el comunicado de prensa de la Agencia Tributaria reconociendo errores en los datos de su informe, se debe «revisar cuanto antes el protocolo de recepción y comunicación de información tributaria ante juzgados y tribunales, para que errores como este no vuelvan a producirse, y evitar que la opinión pública ponga en cuestión la independencia y profesionalidad de este organismo».

En un comunicado, la IHE señala que aun cuando la solicitud de información se refiriera a recabar los datos de los que la AEAT tiene constancia por declaraciones de terceros, «no es impedimento para que se pudiera haber contrastado las imputaciones con los terceros».

Noticias relacionadas

Asimismo, considera necesario que se implementen protocolos de actuación, de manera que cualquier informe patrimonial de la AEAT en ejercicio de sus funciones de auxilio a jueces y tribunales «no sea emitido sin ser cotejado, tal como se hace en los procedimientos tributarios», con lo que se evitaría que los informes «acrediten hechos no contrastados que puedan ser erróneos con los consiguientes perjuicios para los contribuyentes afectados».

Además, la IHE insta de manera urgente tanto a la directora de la Agencia Tributaria como al ministro de Hacienda a que, «sin transgredir el deber de sigilo, den cuantas explicaciones sean necesarias y posibles para alejar el fantasma de la parcialidad, aclarando la razón por la que dichos datos no han sido analizados en su día para determinar su relevancia fiscal, con los protocolos de la AEAT sobre comprobación, que se aplican con criterios técnicos de forma regular y objetiva sobre cualquier contribuyente».

De esta manera, los Inspectores de Hacienda del Estado confían y esperan que la Agencia Tributaria y el Ministerio de Hacienda «sepan hacer frente a estas difíciles circunstancias para que la imagen de un organismo como la AEAT y de sus profesionales no quede dañada».