El sindicato UOB -Unió Obrera Balear- ha solicitado esta tarde mediante un comunicado la dimisión en bloque de todos los equipos directivos de los centros escolares de las islas argumentando que la apertura de expedientes y suspensión de los tres directores de Maó por parte de la Conselleria es un "acto intolerable", ya que lo único que hicieron éstos fue "cumplir la ley y ajustarse a los dictados del Consell Escolar.

El sindicato hace referencia también al colectivo de los inspectores educativos, quienes se han desmarcado de la apertura de expedientes, acusando a la Conselleria de realizar una "caza de brujas que responde a motivos estrictamente políticos", acusando como principales responsables a José Ramón Bauzá, Joana M. Camps y Guillem Estarellas.

Según el sindicato, los expedientes son "una prueba de fuego para las asociaciones de directores -que se reúnen mañana- ya que toda la comunidad docente y la sociedad podrá comprobar si están integradas por una serie de fascistas complices con la política represiva del PP" o si, por contra "están integradas por docentes con un mínimo sentido de la dignidad profesional y de solidaridad con los compañeros". Por ello, continúa el comunicado, "una gran parte del colectivo docente y de la sociedad espera de las asociaciones de directore un gesto decidido y contundente de solidaridad".

El UOB continúa asegurando que "si los directores no dimiten, no harán ningún favor a la comunidad educativa si no que se convertirán en cómplices de la Administración".