En las imágenes captadas por Tur, ya por la mañana, se pueden divisar con claridad los altavoces y la mesa de mezclas instalada sobre las dunas de s’Espalmador para la fiesta. A la izquierda, los restos de una de las hogueras que se hicieron en pleno Parque Natural de ses Salines, en un espacio protegido por su importancia medioambiental.

La isla protegida de s’Espalmador, integrada en Parque Natural de ses Salines, fue escenario de una fiesta ilegal en la madrugada del 23 de agosto, que aunque fue denunciada al 112 transcurrió durante toda la noche sin ninguna intervención por parte la Guardia Civil. Las dos barcas que podían parar la celebración, tanto la del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) como la de Salvamento Marítimo, estaban averiadas, y nada impidió que en plena reserva natural se hicieran hogueras, se pusiera música a altos decibelios, se tiraran cohetes y se instalaran focos y generadores para celebrar la luna llena de agosto.

El representante de la Asociación de Usuarios de la Bahía de Portmany, Antoni Tur Torres, fue quien denunció la fiesta al divisar hogueras y oír música desde su embarcación, fondeada esa noche frente a la isla. La celebración contó con altavoces, generadores y focos que se habían trasladado «con una lancha de alquiler», según detalló Tur, que registró con imágenes el final de la fiesta ilegal, ya por la mañana.

Este navegante llamó al 112 «porque soplaba viento del sur y se podía quemar toda la isla por las hogueras». «Y me llamó la Guardia Civil para decirme que habían enviado una patrulla que estaba a dos o tres kilómetros de distancia, intentando ver el fuego, pero que no veía nada. Me dijeron que no tenían embarcación para venir», añadió.

Según relató, a pesar de que la música siguió durante toda la noche, a las cinco de la madrugada se despertó «con un ruido espantoso». «Tenían unos bafles altos, un discjockey, focos, un generador potente y música de discoteca. Entonces me vestí y me acerqué a la playa. Me comentaron que eran residentes, supongo que en Formentera, y me dijeron: ‘Qué quieres, esto es Eivissa’», destacó.

Tur aseguró que les reprendió y explicó que «es una reserva natural y un sitio para estar tranquilos, y no para que molesten a la gente con música a altas horas de la madrugada». «Le recriminé todo esto y pararon la música. Por la mañana, me despierto con el ruido de cohetes. Volví a bajar y me dijeron que era por el cumpleaños de una chica», relató.

Por último, Tur también criticó que hace pocos días estaba fondeado «sobre la arena frente a s’Espalmador con unos amigos y el vigilante llamó a los GEAS y acudieron para echarnos». «A esa llamada respondieron, pero cuando llamé para avisar que había fuego en la isla y gente con música, nadie apareció por ahí. Ellos terminaron su fiesta. Entonces, que aparezcan los GEAS para echar a la gente que fondea sobre la arena, no sobre posidonia, y no acudan de noche cuando hay fuego en la reserva, me pareció desproporcionado y vergonzoso», remarcó.

Averiadas

Desde la Guardia Civil, reconocieron que esa misma noche tenían las dos embarcaciones averiadas. Tanto la barca neumática de Salvamento Marítimo, que estaba «rajada», como la del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS), que tenía una avería.

Desde la Conselleria balear de Medi Ambient, señalaron que el día 23 recibieron un aviso de «un posible incendio, que no se consumó», pero no tuvieron más detalles de los agentes medioambientales.