El presidente de Autoritat Portuària, Alberto Pons, se encontró ayer con el presidente del Consell de Eivissa, Vicent Serra, y con la alcaldesa de Vila, Pilar Marí. | (c) Sergio G. Canizares

Tras la reunión de ayer mantenida entre el presidente de Autoritat Portuària de Balears, Alberto Pons, el presidente del Consell insular, Vicent Serra, y la alcaldesa de Vila, Pilar Marí, se desvelaron nuevos cambios en la remodelación del puerto de Vila. Y es que, según lo acordado ayer, todas las partes rechazan ahora construir un aparcamiento en la zona de es Martell. Los motivos de esta renuncia, según indicó la primera edil, hacen referencia al alto coste económico en caso de hacerse completamente subterráneo (a pesar de que sería una obra pagada por Autoritat Portuària), mientras que de optar por hacer el aparcamiento semisoterrado, tal y como reclamaba el Consistorio, el impacto visual sería demasiado «elevado» al tener que levantarse 170 centímetros del nivel del suelo. «Se ha descartado, a pesar de que era una buena solución por el número de plazas, porque el aparcamiento totalmente subterráneo es totalmente inviable económicamente», apuntó la alcaldesa en la rueda de prensa. Marí precisó que, a pesar de que al principio les parecía que la construcción del aparcamiento era una «buena idea», «otra cosa es la viabilidad» y destacó que realizarlo totalmente soterrado «lo encarece muchísimo y pensamos que a día de hoy gastar seis o siete millones de euros para 160 plazas es realmente inasumible».