PP y PSOE-Pacte llegaron ayer a un acuerdo durante el pleno para reclamar al Govern la gestión de la competencia del agua con el fin de crear un consorcio insular o una agencia. Esta es una petición que llevaban ambas formaciones en su programa electoral, pero hasta ahora, y pese a que el Consell lo ha reclamado, el Govern no ha dado su brazo a torcer. Esta misma semana el Ejecutivo autonómico indicó que no piensa traspasar la gestión a Eivissa.

El acuerdo incluye el impulso de un pacto del agua para cumplir la directiva europea en esta materia. Asimismo, instan al Govern balear y al Gobierno central a terminar todas las infraestructuras hidráulicas pendientes, como la interconexión de las desaladoras, la desaladora de Santa Eulària, la solución de los problemas de salinidad del agua de riego de Santa Eulària y Sant Llorenç y la construcción de las depuradoras de Vila y Cala Tarida. Asimismo, se aboga por solucionar los problemas de la depuradora de Portinatx y los vertidos de agua al mar. De hecho, quieren que todas las depuradoras permitan que el agua que salga de ellas sea apta para ser reutilizada para que no haya problemas marinos.