El Consell de Govern aprobó ayer, para ser remitido al Parlament, el proyecto de Ley de Ordenación Minera que, básicamente, se centra en las canteras y establece instrumentos para rehabilitar y expropiar canteras inactivas.

Según datos aportados ayer por el conseller Joaquín García, actualmente hay en Balears 124 explotaciones activas. Todas ellas deben contar con un plan de restauración. Pero la ley va más allá: se pretende que puedan llegar a intervenir en otras 1.025 (883 en Mallorca, 58 en Menorca, 78 en Ibiza y 6 en Formentera) que por ley no tenían obligación de hacerlo, ya que sus permisos son anteriores al año 1982.

Las 124 explotaciones activas producen 2,4 millones de toneladas al año y emplean de manera directa a 422 personas, además de la ocupación indirecta que genera en el ámbito de la construcción.

En caso de que se incumpla la obligación de restaurar se prevén duras sanciones y medidas específicas, como que la administración autonómica asuma esta tarea y, en casos concretos, hasta la expropiación de los terrenos. Otra cosa es que, en este momento, no haya partida presupuestaria.

Consejo asesor

El conseller insistió que el proyecto había sido ampliamente debatido con el sector, y aseguró que el objetivo era llegar a acuerdos cuando se debata en la Cámara.

La nueva norma prevé la creación de un registro minero para «conseguir la máxima transparencia», así como la constitución de un órgano consultivo y de asesoramiento.