La Asociación de rent a car reclama que la Ley de Turismo regule y proteja a los consumidores.

Las empresas de alquiler de vehículos de Eivissa han denunciado la ‘mala praxis’ de algunos operadores e intermediarios que mediante publicidad engañosa perjudican al conjunto del sector, además de dañar la imagen de la isla e instan al Govern a regular el sector incluyendo los ‘rent a car’ en la nueva Ley Turística.

De hecho, la Agrupación de Empresarios de Vehículos con y sin Conductor (Aevab), que aglutina al 85% de las empresas y el 50% de la flota, ha mantenido en los últimos meses contactos con la Conselleria de Turisme para tratar de atajar la situación. El presidente de la entidad, Ramon Reus, reclama «ordenar y regular el sector y, de alguna manera, obligar a informar al consumidor de los precios finales» y se muestra optimista en que la nueva Ley de Turismo contemple sus demandas y que se pueda actuar antes de finalizar la presente campaña.

Ofertas fraudulentas

Aevab ha detectado en los últimos meses ofertas en el mercado de hasta cinco euros por coche y día, cuando el precio medio en Balears ronda, excepto en temporada alta, entre los 30 y 40 euros diarios. Sin embargo, no se trata solo de una guerra de precios, sino que el consumidor, al recoger el vehículo o una vez ha regresado a su país, se encuentra con cargos en su tarjeta adicionales. Se pueden cobrar «hasta 120 euros por entregar al cliente el coche con el depósito lleno -según relata Reus- cuando dichos vehículos apenas pueden contener la mitad de este importe en carburante, teniéndolos además que devolver vacíos».

Otra actuación bajo sospecha consiste en la contratación obligatoria de seguros a 25 o 30 euros, cuando según la Aevab el coste real de estos servicios no debería superar los 12 euros. Asimismo, también se han dado casos de «cobro de daños no producidos durante la contratación» del vehículo. De esta manera, una oferta anunciada inicialmente por 35 euros semanales pasa fácilmente a llegar a los 300 euros, multiplicando la tarifa inicial por 8,5.

Estas prácticas, que Reus tilda de «estafa total», se detectaron hace ya tres años en Mallorca y se introdujeron en Menorca y la mayor de las Pitiüses la pasada campaña, intensificándose en la actual. Formentera es la única isla que, por el momento, no ha sufrido esta situación por las dificultades técnicas de mantener allí una gran flota de vehículos.

Ante estas actuaciones, la única contraofensiva que ha podido esgrimir la Aevab es aconsejar al visitante que «lea la letra pequeña para no llevarse sorpresas», para lo que prepara una intensa campaña informativa en colaboración con las grandes compañías multinacionales, además de confiar en la regulación del sector.

Amenazados

El presidente de Aevab considera que el sector va «de mal en peor y si esto va a más, las empresas locales están amenazadas de muerte».

Por su parte, la vicepresidenta de Aevab en Eivissa, Margarita Roig, indica que estas prácticas pueden suponer una merma en el negocio de «aproximadamente un 30%». Roig destaca que las multinacionales de prestigio «no han entrado en este tipo de estrategias», a la vez que apunta, sin dar nombres, a grandes compañías presentes en Levante, Canarias y Balears que operan a través de intermediarios y en Internet «como si fueran brokers».

Aevab cifra la flota total de Eivissa en unas 18.000 unidades, de las cuales unos 8.000 utilizan las estrategias denunciadas. Del resto, entre 3.000 y 4.000 pertenecen a multinacionales y entre siete y 8.000, a empresarios locales. En el ámbito balear, los porcentajes son similares para una flota total de cerca de 60.000 vehículos.