IBIZA NUEVO HOSPITAL CAN MISSES | GERMAN G. LAMA

El hospital de Can Misses de Ibiza ha vuelto a ofrecer a sus pacientes el servicio de Neuropsicología, que durante dos años había permanecido suspendido, por lo que se trata de una buena noticia para todos aquellos pacientes que sufren un deterioro cognitivo o que padecen las secuelas de un ictus.

«Estas enfermedades, como las demencias, afectan no sólo al paciente sino también a su entorno directo y a sus cuidadores», ha explicado la neuropsicóloga Soledad Ribas.

«Ahora podremos atender mejor al paciente, ayudar a sus familiares, y se les dará información y pautas para mejorar en sus cuidados», ha declarado.

Este servicio de Neuropsicología se estuvo ofreciendo durante seis años fuera del edificio de Can Misses por falta de espacio. No obstante, hace dos años se suprimió por «problemas personales», ha señaldo el jefe de Neurología, José Luís Parajuá.

«Afortunadamente -ha añadido- las circunstancias han cambiado y esto supondrá una mejora evidente en el servicio».

En la actualidad, la especialidad de Neurología de Can Misses atiende una media de 400 pacientes al mes, la mitad de los cuales sufren enfermedades relacionadas con demencias producidas por la edad, especialmente por la enfermedad de Alzheimer.

Con el traslado al nuevo edificio y el aumento de consultas se calcula que a partir de ahora se podrá atender entre 500 y 600 pacientes al mes. «Las visitas de neurología acostumbran a ser largas, puede requerir una hora por paciente. Además, las revisiones son frecuentes», ha explicado el doctor Parajuá.

La demanda de este servicio se ha incrementado en los últimos años y se calcula que continuará haciéndolo al producirse un envejecimiento de la población: «A partir de los 80 años, una de cada cuatro personas tendrán algún tipo de demencia. Además, en los últimos 10 años no ha aparecido ningún fármaco que suponga una mejora en el tratamiento del Alzheimer» ha informado el jefe de Neurología del Hospital.

En la actualidad, Can Misses cuenta con un servicio de cuatro neurólogos, de una neuropsicóloga y de una auxiliar que atiende 20 llamadas telefónicas diarias de pacientes para solucionar problemas y dudas concretas sobre la medicación o el tratamiento.