La empresa concesionaria de la gestión integral del agua en el municipio de Santa Eulària, Aqualia, informó ayer a los usuarios de Santa Gertrudis de que no podrán utilizar agua para el consumo «hasta nuevo aviso». El servicio municipal de aguas comunicó ayer la existencia de concentraciones elevadas de sulfatos y cloruros en el agua extraída de los pozos de la zona y que se suministran a través de la red de distribución de Santa Gertrudis. Debido a las concentraciones de sulfato y cloruro existentes, indica Aqualia a través de un comunicado, y según la normativa sanitaria, «la calificación del agua es no apta para el consumo, no pudiéndose emplear el agua de la red pública para la bebida ni para la elaboración de alimentos». «Puede emplearse para otros usos que no supongan su ingestión», matizan desde la empresa que distribuye el agua en Santa Gertrudis.

Cabe recordar que Aqualia inició en febrero el plan anual de limpieza y desinfección de los depósitos de agua que abastecen esta localidad.

Los usuarios pueden dirigirse al teléfono de atención al cliente 971339144 para cualquier duda, aclaración o información adicional sobre un incidente que comienza a reproducirse en distintos puntos de la isla. No en vano, el pasado 30 de julio este rotativo desvelaba el deterioro en la calidad del agua en zonas del municipio de Sant Josep como cala Vadella, cala Carbó, cala Molí, caló d’en Real y la zona alta de cala Tarida. En aquel caso la compañía Aqualia también emitió un comunicado similar al de ayer en el que advertía de que agua suministrada no era apta para el consumo. Desde el Ayuntamiento de Sant Josep explicaron entonces que el aumento de la salinidad del agua se debía a que la desaladora de Sant Antoni tiene una capacidad que se sobrepasa con los picos de demanda, por lo que tienen que recurrir al agua de pozos para continuar con el suministro, de ahí que se hubieran detectado excesos de cloruros y conductividad.