Parte del equipo de Gobierno de Sant Antoni que se reunió ayer con los vecinos y comerciantes preocupados.

La nueva Ley de Comercio balear, que se encuentra en periodo de alegaciones y que el Govern prevé aprobar antes de que se acabe el año, contempla la petición que formuló el año pasado el Ayuntamiento de Sant Antoni en la que instaban a que la capacidad sancionadora y de control sobre las bodegas que venden alcohol toda la noche fuera del Ayuntamiento, y no del Govern como sucedía hasta el momento. La petición ha sido escuchada y queda reflejada en la disposición adicional segunda de este texto legal, que se puede visitar en la web del Govern.

El primer teniente de alcalde de Sant Antoni, José Antonio Verdugo, explicó que incluso «tendremos la posibilidad de cerrarlas, según la gravedad de la infracción y si ha sido persistente o no».

Petición

«Nosotros como ayuntamiento instamos a la modificación de la Ley de Comercio y se nos ha escuchado. Estamos contentos con ello porque hasta ahora si la Policía Local veía que se vendía alcohol de medianoche hasta las ocho de la mañana podía abrir un boletín de denuncia y debía remitirlo al Govern. Con esta modificación, la capacidad sancionadora recae sobre el Ayuntamiento y se agilizarán los trámites de denuncia y sanción», afirmó Verdugo, quien afirmó que se ha conseguido lo mismo con el control de la venta ambulante. «Ahora podremos sancionar directamente y esto es muy positivo porque se agilizará el trámite. Confío en que a partir del verano que viene se pueda desarrollar», apuntó Verdugo tras el encuentro que él, la alcaldesa Pepita Gutiérrez, el concejal de Gobernación, Xicu Cardona, y el jefe de la Policía Local mantuvieron con un grupo de vecinos y comerciantes de la calle Sant Mateu, que remitieron un escrito al Ayuntamiento quejándose de la proliferación de la venta ambulante en esta calle.

«Estamos trabajando, pero los frutos no se ven de manera inmediata», apuntó Verdugo, quien aseguró que el equipo de Gobierno, así como la Policía Local, se comprometen a aumentar la presencia policial en esta calle. «Les hemos explicado que tenemos el máximo número de policías locales que permite la ley, que rondan la cincuentena. Seguimos insistiendo al Gobierno en que se deben aumentar los efectivos policiales, sobre todo en verano», explicó. Por el momento, la Policía Local ha interpuesto 1.950 denuncias por infracción de ordenanzas municipales de las que 1.010 corresponden por venta ambulante. Admás han desarrollado 54 operaciones conjuntas con la Guardia Civil y ocho operaciones conjuntas con la Policía Nacional.