Las propuestas de actuación del Plan Director de Carreteras se basan en un amplio diagnóstico de la red viaria que analiza, entre otras cuestiones, la siniestralidad de la vía o la intensidad del tráfico. En los primeros ocho años del plan, el Consell d’Eivissa prevé invertir 98 millones de euros divididos de la siguiente manera: 57 millones para el programa de construcción, 17 para el programa de conservación, 10 para el programa de seguridad vial y 14 para actuaciones especiales.

En esta primera fase se acometerán las obras en carreteras con mayor intensidad de tráfico y con más necesidad de servicios, principalmente para la construcción de aceras, instalar paradas de autobús o carriles bici.

Las actuaciones concretas en esta fase del Plan serán las obras del triángulo de Jesús (desdoblamiento primer tramo carretera de Santa Eulària y variante de Jesús) y el acondicionamiento de las carreteras entre Sant Josep y Sant Antoni, Santa Eulària y Sant Carles, la carretera de ses Salines, la primera fase de la E-10 (entre Can Sifre y Can Misses), la reforma de la carretera entre Jesús y Santa Eulària pasando por Cala Llonga, además del acceso al aeropuerto desde la carretera de Sant Josep. En este último caso se presentarán alternativas a estudio para ver si es necesario modificar el trazado actual.

Fase II

Entre las actuaciones en la segunda fase del Plan, que se llevarán a cabo a largo plazo, se encuentra la construcción de variantes en Sant Carles, Sant Josep y Sant Rafel, en cuyos proyectos también se presentarán estudios de alternativas de trazados.

También se prevé la segunda fase del desdoblamiento de la carretera de Santa Eulària, desde Can Clavos hasta el núcleo urbano, una reforma que la máxima institución insular tiene en cuenta por su elevada siniestralidad y donde el Plan prevé la reserva de terreno de hasta 100 metros (50 por cada lado de la calzada). Un detalle importante, ya que «si algún vecino quiere llevar a cabo alguna actuación en terreno afectado, debe pedir permiso a Carreteras», recordó la consellera Pepa Costa.

Otros proyectos previstos son la ronda sur de Sant Antoni –manteniendo su trazado previsto en el proyecto–, la segunda fase de la reforma de la E-10 (a partir de Can Misses) además del acondicionamiento de las carreteras de Cala Tarida, Santa Agnès de Corona (tanto desde Sant Antoni como desde Sant Rafel), Cala Vedella, sa Cala desde Sant Joan y Sant Carles), Sant Mateu (desde Corona y Sant Miquel) o la que une Sant Joan y Sant Miquel.

Si se quisiera adelantar alguno de estos proyectos a la primera fase por considerarse prioritaria, tan sólo se tendría que aprobar por plenario.

Para la segunda fase del Plan, el Consell d’Eivissa ha previsto 60 millones de euros, pero sólo para el programa de construcción. Al final de los primeros ocho años de vigencia del Plan, éste tendrá que ser revisado.