Ayer noche tuvo lugar una cena en Sant Joan entre los principales representantes de los dos sectores enfrentados a la que asistieron, entre otros, Vicent Serra, Pepe Sala (senador y presidente del comité electoral de Sant Antoni), Pere Palau (alineado con Sala) y Mariano Juan (vicepresidente del Consell d’Eivissa y alineado con Serra).
Responsabilidad
Desde la cúpula del PP ibicenco, donde dejan claro que no va a haber injerencias en la elección del candidato por parte del comité electoral de Sant Antoni, apelan a la responsabilidad de Pepita Gutiérrez para que acepte dar un paso atrás por el bien del partido. Y es que asumen que si el sector crítico presenta un candidato la actual alcaldesa tendría todas las de perder. Pero las negociaciones no serán fáciles y el conflicto entre las dos ‘familias’ populares tampoco acabaría con la retirada forzosa de Gutiérrez.
Según ha podido saber este periódico, el sector del PP de Sant Antoni que apoya a la primera edil no quiere que la eventual retirada de ésta les salga gratis a los críticos. En este sentido, solicitarán el relevo de Joan Pantaleoni al frente de la junta local del municipio ya que al entender de parte de los militantes «genera conflicto en el seno del partido». En cuanto a los nombres que se manejan para relevar a Pepita Gutiérrez como candidata, el que está sonando con más fuerza durante las últimas semanas es el de la consellera de Mobilitat, Pepa Costa. Aun así, tampoco se descarta que los ‘salistas’ puedan presentar finalmente al actual teniente alcalde y concejal de Turismo, Vicent Ribas ‘Mestret’ o incluso que se plantee una tercera opción ‘sorpresa’.
Por lo que se refiere al futuro político de Gutiérrez, fuentes del PP dan por hecho que Vicent Serra ofrecería a la alcaldesa portmanyí un puesto destacado en la lista electoral del Consell d’Eivissa; una oferta que, a priori, la regidora y también secretaria general de la organización en Eivissa no piensa valorar.
Bauzá
La reunión de anoche en Sant Joan viene a sustituir a la que debían haber mantenido el martes pasado ambos bandos en Palma y con el presidente regional, José Ramón Bauzá, como testigo. Los críticos forzaron la suspensión de la misma porque antes querían hablar a solas con el propio líder. Ante este escenario Bauzá solicitó a sus correligionarios en Eivissa que intentasen llegar a un acuerdo entre ellos y que posteriormente le trasladaran los resultados de la misma.
Dependiendo del grado de acuerdo que se alcance entre los dos sectores, la dirección regional intervendrá para intentar zanjar el conflicto cuanto antes.
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A Vicent Serra ya lo llaman el Robespierre ibicenco, lo malo es que instaura una dictadura déspota. Le damos las gracias por lo divertido que es ver rodar las cabezas...