Representantes de los arquitectos y de la Autoritat Portuària, ayer, a la entrada de la reunión en Can Botino. | (c) Sergio G. Canizares

La reforma de la fachada marítima de Vila sigue adelante, pero dejando de momento a un lado la zona de es Martell, donde previsiblemente se recuperará el párking subterráneo. Esta es la principal conclusión que se extrajo de la comisión extraordinaria de Urbanismo que se celebró ayer, con cierta tensión inicial y más tarde consenso, en el Ayuntamiento de Vila y que contó con la asistencia de los arquitectos y la Autoritat Portuària de Balears (APB).

«La APB nos ha transmitido y propuesto que las obras de la fachada marítima se harán, pero por el momento la zona de es Martell se paralizará y se pospondrá hasta el invierno que viene. En es Martell se ha acordado estudiar y consensuar un párking subterráneo de 180 plazas que no sería a ras de superficie sino que levantaría entre 90 centímetros y hasta un metro porque cuanto más bajen, más complicación técnica habrá y será más caro. La APB se ha comprometido a que los vecinos puedan aparcar allí y los comerciantes de forma rotatoria», explicó Lina Sansano, concejala de Cultura i Patrimoni de Vila.

Plazo

Sansano precisó que el gestor portuario presentará en las próximas semanas un proyecto o borrador sobre este párking que previsiblemente será de 180 plazas, además de presentar el plan de usos sobre el puerto de Eivissa que pedían los arquitectos. La construcción del edificio de planta baja que está previsto en la zona (donde la antigua estación marítima), por el momento, también se aplaza. Con la construcción de este párking se eliminarían las plazas en superficie, donde habría únicamente para carga y descarga.

Cabe recordar que la posibilidad de un párking subterráneo fue inicialmente descartada por las instituciones pitiusas, pues en noviembre del año pasado se mantuvo una reunión entre APB, Consell d’Eivissa y Ayuntamiento cuya principal conclusión fue suprimir el párking subterráneo en es Martell, así como las plazas de aparcamiento en superficie, a instancias de las instituciones pitiusas.

Los arquitectos, por su parte, celebraron el consenso alcanzado ayer. «Se debe hacer lo mejor para la ciudad y esto implica resolver la problemática del párking, cómo definir las infraestructuras que van por debajo de es Martell (poner de acuerdo a Gesa, Aqualia, contenedores soterrados...) y sobre todo se ha vuelto a poner sobre la mesa el párking subterráneo bajo es Martell porque no podemos vender que se va a dulcificar el puerto y la ciudad si al final las 180 plazas en superficie se quedan allí», explicó Pep Toni Roig, tesorero del Colegio de Arquitectos en las Pitiüses y miembro de la ponencia técnica de la comisión de Patrimonio del Consell, quien destacó que este párking subterráneo «es técnicamente posible porque lo desarrollaría la APB, que es la institución que tiene la máxima capacidad técnica y económica para desarrollar el proyecto. En un momento dado se decidió descartar el párking subterráneo, pero es una pieza clave en la remodelación de la fachada marítima», concluyó el arquitecto.

En lo que sí coincidieron todas las partes es en que las obras se tienen que hacer: «Todos queremos que se hagan las obras, tanto PSOE-Pacte, como los arquitectos como por supuesto la APB. En esto estamos todos de acuerdo», explicó Lina Sansano. Durante la reunión de ayer, además, los arquitectos propusieron que celebre una comisión mixta para hacer un seguimiento de las obras, pero por el momento no se ha fijado una fecha.