El PSIB ha responsabilizado a la gestión de los Gobiernos del PP del aumento de la pobreza infantil en Balears y en el Estado y ha presentado una serie de enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2015 para luchar contra este incremento.

Según han informado los socialistas en un comunicado, las cifras de Cáritas, Unicef y la OCDE sitúan a España como el tercer país europeo con mayor tasa de pobreza infantil, tras Grecia y Letonia, con cerca de tres millones de menores de 17 años en situación precaria.

Además, en Balears «las cifras son más graves que las de la media de española» al presentar más de 68.000 niños y adolescentes en situación de riesgo de exclusión económica. De éstos, 57.000 manifiestan situaciones de alerta por pobreza severa.

«Son niños que pueden quedar condenados injustamente cuando aún no han tenido tiempo de poder ser juzgados como adultos; es una situación que provoca angustia», ha indicado el diputado Pablo Martín.

Las cifras estatales de hogares con niños que tienen a todos sus integrantes en paro ha aumentado un 200 por ciento. No obstante, la inversión destinada a los niños por el Gobierno central ha descendido en 800 euros per cápita, con el resultado de la pérdida de diez años en inversión social en favor de la niñez, según cálculos de la propia OCDE.

«En estos tres años el PP ha aumentado el IVA del material escolar, ha reducido un 50 por ciento las becas para libros y comedores, y ha impulsado una reforma laboral que ha supuesto una gran devaluación salarial que ha dejado muchas familias sin recursos para gastos necesarios», ha indicado Martín, quien ha insistido en que «lo peor de todo es que el Plan de inclusión social del PP ha dedicado 1,4 euros por cada niño en riesgo de exclusión al año».

Según el PSIB, las diferentes políticas sociales y recortes impulsados por el PP favorecen el crecimiento de la desigualdad entre ricos y pobres. Así, recuerdan que el 1 por ciento de las fortunas del Estado tienen la misma renta que el 70 por ciento del resto de la población española.

Por ello, pobreza infantil y desigualdad social son dos de las lacras que el PSIB piensa combatir, a partir del planteamiento de una serie de enmiendas presentadas al proyecto de PGE, y con la propuesta de llegar a un acuerdo de consenso entre todas las fuerzas políticas para un Pacto por la infancia.

Concretamente, las enmiendas plantean destinar una partida de 1.000 millones de euros para actuar contra la pobreza infantil en el Estado a través de un plan de lucha, habilitar un subsidio para parados de más de un año de duración, para que puedan obtener una cantidad de 426 euros mensuales mes 100 euros por cada hijo a cargo, o aumentar la prestación por hijo desde los 291 hasta los 600 euros.

Además, reclaman elevar el mínimo de ingresos para la prestación de los 11.500 hasta los 14.000 euros y destinar partidas de 50 millones para la recuperación del plan Educa y 60 millones más para la integración educativa de los niños inmigrantes.

«Tienen que comprender que la pobreza no se erradica con caridad sino con justicia social», ha dicho Martín, quien ha añadido que «el PP ha gastado mucho dinero en salvar un banco presidido por uno de sus amigos, que daban dinero a otros amigos suyos, en lugar de dar dinero para salvar a las familias».